Glendys Josefina Moreno, de 42 años, quien el 31 de julio del 2020 introdujo en una bolsa a su hija, de cinco horas de nacida, estará 28 años y cinco meses en prisión, una condena cercana a la pena máxima de 30 años que establece la justicia venezolana.
A solicitud de la Fiscalía 10, el Tribunal Tercero de Juicio dictó la sentencia por homicidio frustrado de víctima especialmente vulnerable por lo que seguirá confinada.
Cuando la humanidad huía de la muerte y los gobiernos adoptaban medidas drásticas de confinamiento para evitar la propagación de la Covid-19, en uno de aquellos Puntos de Atención Social Integral, en la avenida Alí Primera, sede de la Escuela Mixta de Coro, Glendys Josefina Moreno Perozo, procuró la muerte de la hija, cinco horas después de haberla parido sin ayuda de nadie.
Glendys Josefina, para entonces de 38 años y con registros policiales por hurto, estaba entre el grupo de 23 connacionales que, tras haber regresado al país, estaban confinados por medidas sanitarias y preventivas en esta institución educativa.
De contextura robusta, la mujer oriunda de Acarigua, estado Portuguesa dio a luz y cinco horas después, cuando el 31 de julio del 2020 iniciaban su dinámica, metió a la neonata en una bolsa plástica la cual abandonó entre la vegetación, lejos de la vista de todos, detrás de la escuela.
Por fortuna, otro connacional se percató y gracias a la intervención de unos milicianos, así como de los policías, se dio el milagroso rescate. La situación se generó alrededor de las siete de la mañana de aquel viernes.
Policías llevaron a la recién nacida al Hospital Doctor Alfredo Van Grieken.
Glendys Josefina, quien ante los policías se identificó como abogada, es natural de Acarigua, estado Portuguesa, pero vivía en la calle principal del sector El Cerro, de Los Taques, hacia donde pensaba dirigirse tras haber llegado a Coro, procedente de Colombia.
CACTUS24 09-02-24
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