Los jefes de las familias reales de Malasia nombraron este viernes a Ibrahim, el sultán del estado meridional de Johor, como el futuro soberano de esta monarquía constitucional y rotatoria.
Si bien el rey tiene un papel fundamentalmente honorífico, es muy respetado, en particular por los malayos musulmanes, en tanto que líder simbólico del islam en el país. El hecho de criticar públicamente a la monarquía es incluso pasible de una pena de prisión en Malasia.
El monarca supervisa los principales nombramientos políticos, como el del primer ministro. También es el comandante en jefe honorario de las fuerzas armadas, y puede conceder la gracia a prisioneros.
Desde la independencia de esta antigua colonia británica en 1957, rige en el país un original sistema de alternancia en el trono. En virtud de este, cada cinco años, los jefes de las familias de los nueve antiguos reinos del país designan a uno de ellos como nuevo soberano.
De esta forma, el futuro 17º rey de Malasia será Ibrahim Sultan Iskandar, de 64 años.
Jurará su cargo al término del mandato del actual rey Adbullah Ahmad Shah el 31 de enero próximo. Meses más tarde está prevista una ceremonia de entronización.
Ibrahim viene de la acaudalada y poderosa familia real de Johor, que cuenta además con un ejército privado. Su padre, Iskandar, fue rey de Malasia de 1984 a 1989.
Cactus24 27-10-23