La madrugada siguiente a la nochebuena, en el sector Universitario de Punto Fijo, quedó al descubierto un caso de abuso sexual que estuvo nueve meses en secreto, no porque la víctima de 14 años de edad consintiera, sino porque su silencio era garantía de vida ante las amenazas de Jefferson Leandro Urdaneta Finol, la pareja sentimental de su madre.
La madrugada de aquel domingo, en la resaca de la nochebuena, casi todos dormían, la adolescente en su cuarto, su hermano de 13 años en otro mientras, su madre también estaba en otro lugar de la casa, y Jefferson Leandro de 40 años, estaba despierto.
La discusión entre la adolescente de 14 años y padrastro Jefferson hizo que la madre se acercara, observando que su pareja le quitaba el short a su hija. Inmediatamente se acercó, lo empujó para alejarlo de su hija, siendo objeto de agresión física.
Pero las heridas físicas fueron insignificantes ante las heridas emocionales cuando el hombre le confesó que desde abril mantenía relaciones sexuales con la adolescente quien lo confirmó, diciendo que éste abusaba de ella cada vez que estaban solos, relatando que la amarraba y que además de obligarla a practicarle sexo oral, la violaba.
Lo ocurrido quedó expuesto en el expediente y en principio en la denuncia que madre e hija formularon en el comando de la policía del municipio Carirubana quien detuvo al acusado ese día.
Recientemente y tras dos años y siete meses de aquellos hechos, Jefferson Leandro Urdaneta Finol, acusado por la Fiscalía 16 del Ministerio Público, recibió por parte del Tribunal Segundo de Juicio el dictamen por sus actos, en este caso 14 años de prisión.
Abuso sexual y actos lascivos en perjuicio de la adolescente y violencia física contra su pareja de 49 años, fueron los delitos que motivaron su sentencia y por los cuales se fijó como sitio de reclusión la Comunidad Penitenciaria Coro según boletín de prensa del Ministerio Público.
Cactus24//08-09-2023
