El sueño del reconocido profesor de baile, danza y cultura William Andrades podría desvanecerse luego de su muerte. La infraestructura de la fundación que creó en el 2004 está en franco deterioro y su hijo Emilio José Véliz solicita apoyo para rescatar los espacios y mantener el legado de su padre en el tiempo.
El patrimonio cultural del maestro Andrades no solo fue reconocido en el país, sino que cruzó fronteras; participó con la agrupación Jurijurebo, que tiene más de 29 años de fundada, en varios eventos y concursos internacionales. Hoy las riendas de la fundación las lleva su hijo, quien apuesta en seguir formando artistas de la danza.
En esta sede, ubicada en la avenida Luis Beltrán con Pomarrosa, en la ciudad de Punto Fijo, ensayan cuatro agrupaciones de danzas. «A pesar del riesgo por el deterioro de las instalaciones, sobre todo en la platabanda seguimos los ensayos para no desvanecer la tradición y seguir fomentando la danza», expresó Véliz.
En varias oportunidades, Véliz ha solicitado ayuda al Gobierno regional y municipal, sin embargo no ha recibido respuesta. «Requerimos apoyo de quien pueda brindarle; instituciones públicas o privadas. Los invito a visitarnos para que observen el bonito trabajo que hacemos, pero es importante rescatar los espacios», exhortó.
Fotos: Cortesía
Cactus24//03-09-2022