Un empresa a la vanguardia de microchips subcutáneos en Suecia ha desarrollado un pasaporte sanitario que puede llevarse bajo la piel.
Este microchip es capaz de almacenar el pasaporte de vacunación y ser leído como tal por otros dispositivos.
Esta tecnología ha sido desarrollada por la startup Epicenter, de Estocolmo, y podría convertirse en un medio para llevar el pasaporte Covid siempre encima, debajo de la piel.
Biohackers, presentando el microchip. El implante es del tamaño de un grano de arroz y puede ser leído por cualquier dispositivo que emplee el protocolo de comunicación de campo cercano (NFC, por sus siglas en inglés, Near-field communication).
El microchip puede implantarse en el brazo o en la mano, entre el pulgar y el índice. En 2017 la empresa tecnológica Three Square Market, de Wisconsin, desarrolló unos implantes similares que daban acceso a sus empleado a abrir puertas y les permitía pagar alimentos y bebidas.