El presidente estadounidense Joe Biden recibió hoy de forma virtual a representantes de más de 100 países para una Cumbre por la Democracia, un evento en el cual durante dos días mandatarios mundiales reforzarán los valores democráticos que están “siendo amenazados” en los últimos años.
“Lo que estamos viendo indica que estamos en la dirección equivocada”, declaró ante líderes, miembros de ONG y funcionarios de gobiernos democráticos, acompañado por el secretario de Estado, Antony Blinken. “Hace 15 años que la democracia está en retroceso”.
La democracia enfrenta desafíos que debilitan su estabilidad por lo que sostenerla requiere de una “lucha constante”, aseguró Biden, y de “renovarla con cada generación” ya que es “un tema muy urgente”.
“El gobierno es del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” y “la democracia no es un estado”, por lo que reforzarla demanda acciones, agregó.
Para la Casa Blanca, la cumbre encarna el liderazgo de Estados Unidos en una lucha existencial entre democracias y autocracias.
“Los autócratas tratan de buscar más poder, ampliar la influencia en el mundo y justiciar las políticas represoras como una forma más efectiva para abordar los desafíos de hoy”, sentenció el demócrata, en medio de un aumento de tensiones con Rusia y un creciente poder de China.
Exclusión y boicot
Tanto Putin como Xi Jinping quedaron deliberadamente fuera, lo cual según estos países aviva una “brecha ideológica”.
“Ningún país tiene derecho a juzgar el vasto y variado panorama político del mundo con un único criterio”, escribieron el embajador ruso, Anatoly Antonov, y el chino Qin Gang.
Lo que acabó por exasperar a Pekín fue que el gobierno estadounidense invitara a Taiwán, una isla gobernada democráticamente, a la que la China comunista continental considera parte de su territorio, aunque no esté bajo su control.
El lunes Washington también anunció que no enviará a funcionarios gubernamentales a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín en febrero en protesta por las violaciones a los derechos humanos, incluido el “genocidio” contra el grupo étnico de los uigures en la región de Xinjiang.
Australia, Reino Unido y Canadá se han sumado al boicot diplomático, pero sus atletas acudirán. Rusia se unió a China para criticar la decisión.
Invitados
En América Latina y el Caribe se ha excluido a los gobiernos de ocho países: Nicaragua, Cuba, Bolivia, El Salvador, Honduras, Guatemala, Haití y Venezuela, aunque se ha invitado a Juan Guaidó, el líder opositor venezolano a Nicolás Maduro.
Entre los jefes de estado presentes se encuentra Alberto Fernández, la premier neozelandesa Jacinda Ardern y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
Biden asumió en el cargo en un momento en el que las reglas democráticas de Estados Unidos han sido desafiadas: Donald Trump ha intentado revertir los resultados electorales de 2020 sin reconocer su derrota y el Capitolio fue atacado a principios de año, un histórico suceso que marcó a los estadounidenses.
“Nuestros problemas aquí son mucho peores que en cualquier otra democracia occidental. Nuestro Capitolio fue atacado, un intento de golpe de Estado. No hemos visto que eso pasara en París, ni en el Bundestag o la sede de la UE en Bruselas”, analizó el profesor de ciencias políticas de la Universidad de Duke.
“Si queremos competir, tenemos que esforzarnos al máximo y eso depende más de nosotros en el país que de reunir de alguna forma a 100 líderes y decir ‘nos gusta la democracia’”, agregó.
Cactus24 09-12-21