La Iglesia venezolana expresó su preocupación por la situación en el país y advirtió sobre el riesgo de restricciones a la libertad religiosa, tomando como referencia la persecución que enfrentan los católicos en Nicaragua.
Durante la 123° Asamblea Ordinaria Plenaria, los obispos destacaron su compromiso con la defensa de los derechos fundamentales y el acompañamiento a los venezolanos en medio de la crisis social y política.
El arzobispo de Valencia y presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Jesús González de Zárate, afirmó que la Iglesia en Venezuela trabaja y ora para evitar llegar a un escenario similar de países donde sacerdotes y obispos han terminado en prisión o perseguidos por la dictadura de Daniel Ortega, reseñó ACI Prensa.
«Rezamos y trabajamos para que en Venezuela se respeten la paz, la libertad y la armonía. Aspiramos a que el país mantenga la posibilidad de vivir sin miedo y con el derecho a profesar la fe sin restricciones ni represalias», señaló el prelado.
Ante la creciente represión contra organizaciones y líderes religiosos en América Latina, la Iglesia hizo un llamado a las autoridades para garantizar un ambiente de respeto a la diversidad de creencias y a los derechos fundamentales.