El príncipe Harry llegó a un acuerdo para poner fin a los procesos pendientes por recopilación de información ilícita contra el editor del tabloide Daily Mirror, y obtendrá una compensación económica, anunció el viernes su abogado.
Según David Sherborne, abogado del príncipe Harry, la empresa editora del tabloide, MGN, acordó pagar una «suma sustancial» al hijo menor del rey Carlos III y hacerse cargo de todos los gastos judiciales.
En la batalla que ha iniciado el príncipe, de 39 años, contra la prensa sensacionalista británica, el tabloide ya había sido condenado en diciembre por la misma causa.
El acuerdo alcanzado ahora se refiere a otros 115 artículos sobre los que la justicia no se había pronunciado todavía.
El pasado 15 de diciembre, el Tribunal Superior de Londres falló a favor del príncipe Harry y condenó a MGN a pagarle 140.600 libras (177.413 dólares) en concepto de indemnización.
En este acuerdo alcanzado en febrero, Sherborne señaló que la indemnización incluiría un pago provisional para hacer frente a los gastos del juicio de 400.000 libras (505.000 dólares).
«Después de nuestra victoria en diciembre, el grupo Mirror finalmente accedió al resto de mis demandas, lo que habría requerido dos juicios más», dijo el príncipe Harry a través de su abogado.
Harry advirtió que esta indemnización que ha conseguido por parte del tabloide es solo un paso en la batalla que seguirá llevando contra la prensa sensacionalista.
«Nuestra misión continúa. Creo en el cambio positivo que traerá esto para todos nosotros. Por eso comencé esto y lo seguiré haciendo hasta el final», señaló.
En el fallo del pasado diciembre, el tribunal estimó que 15 de los 33 artículos juzgados, publicados entre 1996 y 2009, fueron el resultado del pirateo de mensajes vocales del duque de Sussex o de su entorno.
El juez concluyó que los periódicos llevaron a cabo escuchas telefónicas «extensas» de celebridades entre 2006 y 2011, incluso cuando estaba en curso una investigación pública sobre la conducta de la prensa británica.
Durante el juicio, el príncipe prestó declaración durante ocho horas, repartidas en dos días de audiencia, el pasado mes de junio.
Se trataba de la primera aparición de un miembro de la familia real en un tribunal desde Eduardo VII en 1891, antes de ser rey, en un juicio por difamación.
El príncipe ha prometido hacer de la reforma de los medios británicos una de las misiones de su vida.
En este sentido, ha iniciado una batalla legal contra varios medios sensacionalistas, a los que responsabiliza de la muerte de su madre Diana en 1997, en un accidente de coche en París, cuando era perseguida por los ‘paparazzi’.