En los últimos días han surgido rumores de una posible separación entre el actor Orlando Bloom y la cantante Katy Perry.
Estas suposiciones empezaron a tomar fuerza luego de Bloom celebrara el pasado 13 de enero sus 47 años, acompañado de sus amigos y disfrutando de la nieve. Sin embargo, su prometida, Katy Perry, no estuvo presente en la celebración, marcando otro evento especial del que la pareja ha disfrutado por separado recientemente.
La ausencia de Perry se hizo notar aún más cuando Bloom asistió solo a los Globos de Oro y a las fiestas posteriores al evento en Los Ángeles, el 7 de enero. Mientras tanto, Perry, de 39 años, optó por ir a hacer snowboard en Aspen. La decisión de Perry de no acompañar a Bloom en los Globos de Oro ha levantado algunas cejas, especialmente considerando que la pareja se conoció en ese mismo evento en 2016, al cual Perry ha llamado su “aniversario” en una publicación en redes sociales.
Las especulaciones sobre el futuro de la pareja, que se comprometió en 2019, están aumentando. Fuentes cercanas han expresado su preocupación sobre si la boda se llevará a cabo, señalando la falta de planes concretos y revelando que Perry y Bloom tuvieron una discusión por la decisión de Bloom de asistir a los Globos de Oro, ya que habían planeado unas vacaciones en Aspen juntos. “No estaba contenta con que él abandonara su escapada”, reveló la fuente, agregando que este no es el único signo de problemas en la relación.
Ambos han admitido que su relación requiere esfuerzo. Mientras Perry ha mencionado la terapia de pareja y el uso de un calendario compartido como herramientas para mantenerse en sintonía, Bloom ha reconocido que sus intereses no siempre coinciden, describiendo sus mundos como “dos mundos muy diferentes”. La única área en la que parecen conectarse completamente es en su relación con su hija Daisy, de 3 años.
A pesar de vivir juntos, la pareja parece estar llevando vidas separadas, con Perry enfocada en su trabajo en “American Idol” y su línea de zapatos, y Bloom prefiriendo actividades llenas de adrenalina. Después de una ruptura en 2017 y una reconciliación un año después, las fuentes indican que la pareja se encuentra en un momento en el que, pareciera, ya no tienen mucho interés en salvar su relación.
“La consejería que solían tener está en el pasado. Da la sensación de que Katy y Orlando han dejado de esforzarse”.