Camilo Hurtado Campos, de 63 años, que se desempeñaba como un entrenador de fútbol quedó al descubierto al dejar olvidado su teléfono celular en un restaurante de Tenessee Estados Unidos.
Los empleados de lugar, al percatarse que el hombre habría dejado su teléfono celular, empezaron a revisarlo para investigar de quien se trataba, encontrando evidencias de cómo Campos abusaba sexualmente de niños entre 9 a 17 años.
Enseguida dieron parte a las autoridades quienes detuvieron al hombre.
Ahora Campos es acusado por los delitos de violación de un niño y explotación sexual de un menor.
En las primeras investigaciones las autoridades ya identificaron a tres de las víctimas registradas, mientras que otras cinco acudieron a denunciar a Hurtado.
“Las personas que fueron víctimas en algunas de las grabaciones que se han presentado ahora tienen 20 años. Si haces cuentas, podría haber una década de víctimas que no conocemos”, dijo el teniente de la Policía de Franklin, Charles Warner.