Al menos siete policías federales, entre ellos un oficial, murieron este domingo en un atentado atribuido a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) contra un camión que los transportaba en el norte de Irak, según informaron fuentes policiales.
A la explosión de una bomba siguió «un ataque directo con armas ligeras» cerca de la aldea de Shalal al-Matar, en las afueras de Kirkuk, dijo a un oficial de la policía federal que pidió el anonimato, y atribuyó el ataque, todavía no reivindicado, al EI. «Un atacante fue abatido y estamos buscando a los demás», dijo, e indicó que había dos heridos.
En Bagdad, un funcionario del Ministerio del Interior confirmó el atentado y ratificó el número de fallecidos.
El EI, que a partir de 2014 logró conquistar vastos territorios en Irak y la vecina Siria, vio luego cómo su autoproclamado «califato» era derrocado por sucesivas ofensivas en estos dos países y aunque Irak declaró su victoria militar sobre el EI en 2017, los yihadistas siguen activos en varias zonas del país.