Un excongresista aliado del presidente brasileño Jair Bolsonaro disparó y lanzó granadas contra policías, dejando al menos dos heridos, en un intento fallido de impedir su arresto, informaron las autoridades este domingo.
El exdiputado Roberto Jefferson enfrentaba una orden de cárcel del Supremo Tribunal Federal (STF) por incumplir los términos de su prisión domiciliaria, luego de atacar a la presidenta del máximo tribunal en redes sociales.
«Tal como se lo determiné al ministro de Justicia, Anderson Torres, Roberto Jefferson acaba de ser arrestado», dijo Bolsonaro en un video colgado en su cuenta de Twitter.
«El trato que se da a quien dispara a un policía es el de bandido. Expreso mi solidaridad a los policías heridos en el episodio», añadió el mandatario ultraderechista.
La Policía Federal informó previamente que al proceder al arresto, en la ciudad de Levy Gasparian, en el estado de Río de Janeiro, el individuo solicitado «reaccionó» y dos policías «fueron heridos por esquirlas de una granada que arrojó».
Los dos afectados recibieron atención médica y se encuentran en buen estado, según las autoridades, que reforzaron la presencia policial en el lugar.
Bolsonaro había repudiado más temprano la «acción armada» de Jefferson, quien duró ocho horas atrincherado en su casa y confirmó en un video publicado en redes que disparó, aunque supuestamente sin intención de herir a los agentes.
Pero el mandatario al mismo tiempo condenó las investigaciones judiciales contra el exlegislador que, a su juicio, se llevan adelante «sin ningún respaldo en la Constitución y sin actuación de la Fiscalía».
El jefe de Estado ordenó entonces la presencia del ministro de Justicia en el lugar.
El magistrado del STF, Alexander de Moraes, había ordenado el regreso a prisión de Jefferson alegando varios incumplimientos de los términos de su prisión domiciliaria.
Recientemente había atacado a la magistrada Carmen Lúcia, llamándola «bruja» y «prostituta».
El incidente armado ocurre a una semana del balotaje presidencial, que enfrenta a Bolsonaro con el exmandatario izquierdista Luiz Inácio ‘Lula’ Da Silva, favorito en los sondeos.
«Las ofensas contra Carmen Lúcia no pueden ser aceptadas por nadie que respete la democracia. Crearon en la sociedad una parte violenta. Una máquina para destruir los valores democráticos. Esto genera un comportamiento como el que vimos hoy», escribió ‘Lula’ en Twitter, donde se solidarizó con los heridos.
La campaña ha estado marcada por enfrentamientos de Bolsonaro y sus aliados contra decisiones de la justicia así como de la autoridad electoral, que preside Moraes. También por una profunda polarización y casos de violencia política.