Viena es la ciudad más habitable del mundo, según un estudio hecho por The Economist. Algunos de los criterios utilizados para estas clasificaciones internacionales son la infraestructura, el transporte público, la educación y la sanidad. Dentro de estos factores, la capital de Austria sobresalió por sus imponentes infraestructuras y sus asequibles conexiones de transporte público, entre otras características.
Nikolaus Graeser, portavoz de la Oficina de turismo de Viena, expresa su orgulloso por este nombramiento. «Existe además el estudio Mercer, en el que Viena ocupa el primer puesto por décima vez consecutiva. Y ahora volvemos a ocupar el primer puesto en la clasificación realizada por The Economist. También hay un índice de ciudades verdes y una clasificación de ciudades inteligentes en las que Viena también está a la cabeza».
Y es que Viena, como estrategia para contribuir a disminuir el cambio climático, se ha fijado además un ambicioso objetivo: ser neutral desde el punto de vista climático para 2040. Lo que significa menos hormigón, más espacios verdes, sombra y una gestión eficiente de la energía.
«En verano hace mucho calor. Eso se debe en gran medida al cambio climático, pero Viena está tratando de hacer frente a eso con una amplia gama de piscinas públicas y espacios verdes», comenta Theo Loecker, estudiante.
Esta ciudad tiene una gran disponibilidad de espacios verdes, pues cuenta con alrededor de un cincuenta por ciento de zonas verdes dentro de los límites de la ciudad. También se pueden destacar las orillas de la Isla Danubio que tienen una amplia longitud de playa, para disfrute de sus habitantes.
En Viena es posible andar en bicicleta por los viñedos, visitar los bosques y disfrutar de una experiencia cultural todo en un mismo día.
Cactus24 (11-07-2022)
