Rafa Nadal volvía el martes a Wimbledon después de tres años sin participar en el tercer Grand Slam de la temporada. Enfrente un rival con ritmo de bola para un primer duelo de Grand Slam Francisco Cerúndolo, un jugador que había demostrado que en hierba tiene golpes y que a sus 23 años tiene todavía mucho por crecer. El gran favorito era Nadal pero Cerúndolo llegaba sin nada que perder.
Nadal fue el primero en conseguir un break y poner el 3-1 a su favor, pero el argentino reaccionó y tras dos juegos consecutivos ponía las tablas en el marcador. El viento era un impedimento para ambos pero los dos tenían que saber adaptarse a las circunstancias en las que estaba el partido. A Rafa se le veía algo descoordinado, pero es algo normal en un primer partido en césped.
El momento clave de la primera manga llegó en el noveno juego, cuando Rafa tuvo que levantar tres bolas de break. Salvó todas ellas y ganaba confianza. La presión pasaba a un Cerúndolo que veía como Rafa disponía de repente de dos bolas de set. A la segunda el español tras un gran revés se llevaba un primer parcial en el que tuvo un digno adversario al otro lado de la pista.
Nadal comenzó llevando la iniciativa en el segundo parcial. El balear seguía sufriendo en algunos turnos de servicio y es que Cerúndolo estaba muy tranquilo sobre la pista, sin ningún tipo de presión. Nadal salvaba una bola de break en el quinto juego para ponerse 3-2 por delante. Luego aprovechó su oportunidad para tomar las riendas con el 4-2. Tras confirmar el break con el 5-2 estaba más cerca del segundo parcial. Cerúndolo estaba contra las cuerdas en el siguiente juego y tuvo que levantar dos bolas de set en contra con el servicio. Lo hizo para seguir con opciones, pero Nadal ganando el noveno juego en blanco y cada vez con mejores sensaciones en cuanto a movimientos y golpes se acaba llevando el segundo set.
Rafa comenzaba empezando a encarrilar la victoria con un break que le daba el 2-1. En cambio no pudo confirmar la rotura y es que en blanco Cerúndolo ponía el 2-2. Desde ese momento el argentino ganó confianza y se animaba con el público para seguir llevando la iniciativa en el marcador. Francisco consiguió otra rotura en el octavo juego que le dejaba con el 5-3 y el servicio para llevarse el tercer parcial. Llegaron dos bolas de set con el 40-15, pero Rafa las salvó y tenía dos oportunidades de break. En cambio no aprovechó ninguna y Cerúndolo a la tercera bola de set lograba llevarse el tercer parcial y poner en aprietos a Nadal.
Cerúndolo salía con la misma confianza y es que cada vez estaba más cómodo. Nadal tenía que adaptarse al ritmo de juego impuesto por un jugador que estaba brillando sobre el césped de la pista central de Wimbledon. Con el 3-1 del argentino, hacían saltar las alarmas del español y es que Rafa seguía sufriendo con servicio. El momento clave llegó en el quinto juego, cuando Nadal salvó cuatro bolas de break para poner el 2-3 y no dejar escapar a su rival.
Cerúndolo seguía ganando su servicio sin problemas, hasta que llegó el octavo juego cuando Nadal se encontró un 0-40, que aprovechó y ponía las tablas. Seguidamente volvía a ganar su saque en blanco para con el 5-4 quedarse a son un juego de obtener la victoria. Toda la presión estaba en Cerúndolo. El argentino con el 15-40 estaba contra las cuerdas y un revés se marchaba ancho para dar la primera victoria al balear, en un partido muy trabajado./Canal Tenis
CACTUS24 28-06-22