La medida que suspende el derecho de reunión y otorga poderes adicionales a las fuerzas de seguridad, entra en vigor tras ser aprobada por la Asamblea Nacional del Salvador, de mayoría oficialista, a solicitud del presidente Nayib Bukele.
El Gobierno asegura que el estado de excepción es necesario para luchar contra la violencia de las pandillas. Sin embargo, organizaciones civiles denuncian violaciones a los derechos humanos por presuntos arrestos arbitrarios y malos tratos en prisión.
Con 67 votos a favor entre 84 escaños, la Asamblea Nacional de El Salvador, de mayoría oficialista, aprobó la prórroga del estado de excepción por 30 días, por lo que culminaría a finales del próximo junio.
El estado de excepción fue aprobado inicialmente después de una serie de homicidios, en marzo, cuando las autoridades señalaron a las pandillas como responsables de 62 asesinatos en un solo fin de semana, un nivel de violencia que el país de 6,5 millones de habitantes no había visto en años.
El decreto otorga a las fuerzas de seguridad poderes adicionales para combatir a los grupos delictivos, suspende el derecho de reunión, asociación, defensa e inviolabilidad de la correspondencia y telecomunicaciones y extiende a 15 días el tiempo que una persona puede ser detenida sin cargos, entre otras medidas.
El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, prometió que las acciones contra los presuntos criminales continuarán. “Esta guerra va a continuar por el tiempo que sea necesario y en la medida en que el público lo siga exigiendo (…) Vamos a seguir enfrentando este cáncer, y lo hemos dicho antes y lo mantenemos, esta guerra seguirá hasta que las pandillas sean erradicadas del territorio de El Salvador”, sostuvo Villatoro.
Cactus24 26-05-22