César Martínez, habitante del sector La Urupagua de la ciudad de Coro, denunció la falta de atención al desborde de aguas negras desde el mes de noviembre del año 2021 junto a un grupo de vecinos de su comunidad.
La laguna de aguas servidas afecta a 300 familias y a los sectores Coviobrenco, Ignacio Sarmiento; así como también a la población estudiantil y administrativa de la Universidad Nacional Experimental Rafael María Baralt y el colegio Mi pequeño Mundo ubicado en la avenida Doctor Rafael Gallardo.
«No ha sido posible tener una respuesta de los entes del Estado», dijo.
La entrada del recinto universitario es intransitable producto de un bote de aguas negras y basura acumulada. A pocos metros se encuentra el IPASME y el CDI Che Guevara.
Los vecinos aclararon que aunque no han consignado un documento formal ante las instituciones, han conversado con funcionarios de la alcaldía de Miranda y la hidrológica regional, pero no han tenido respuesta.
«Es necesario que se tomen cartas en el asunto, que se haga un seguimiento transparente y que el trabajo se realice bajo la calidad técnica que debe llevar», apuntó Martínez.
Redacción Jhonattam Petit – corresponsal en Coro
