A través de una nota de prensa, Fundaredes advirtió que la salud de Javier Tarazona, director de esta ONG, está deteriorándose.
Destacan que Tarazona cumple este 2 de diciembre 5 meses de la «arbitraria detención en el SEBIN en el Helicoide, en medio de un proceso absolutamente viciado y violatorio de todos sus derechos fundamentales».
Refieren que la audiencia preliminar de Javier Tarazona ha sido diferida al menos en 12 oportunidades, sin que se informe a la defensa las razones por las cuales se dan estos retrasos, «que en realidad obedecen a dilaciones sin justificación».
Miembros del Foro Penal, defensores de los activistas de FundaRedes, acudieron nuevamente ante tribunales el pasado 25 de noviembre cuando fue convocada por décima segunda vez la audiencia, y una vez en el lugar les indicaron que la misma no se llevaría a cabo por falta del traslado de Tarazona.
Javier Tarazona fue detenido el pasado 2 de julio de 2021, junto a Omar de Dios García, y Rafael Tarazona, todos activistas de FundaRedes, cuando acudieron ante la Fiscalía de la ciudad de Coro, estado Falcón, a denunciar la persecución y amenazas por parte de sujetos armados no identificados mientras llevaban jornadas de formación a esta zona costera del país.
Desde el momento de su detención a los tres activistas de FundaRedes se les vulneraron todos sus derechos, fueron víctimas de desaparición forzada e imputación de delitos que no cometieron solo por documentar diversos casos de violaciones de derechos humanos que se registran en Venezuela e incidir desde la organización nacional e internacionalmente.
Se deteriora la salud de Javier Tarazona
Javier Tarazona, profesor universitario, destacado dirigente social y defensor de derechos humanos, presenta un severo cuadro de deterioro de su salud en medio de su injusta detención en el SEBIN, en reiteradas oportunidades los familiares y abogados defensores han solicitado le sea proporcionada atención médica urgente pero esta petición ha sido denegada.
Tarazona, quien ha sido diagnosticado con enfermedades de base previas a su detención, es paciente hipertenso, con dislipidemia debido a sobrepeso y su situación se ha agudizado con problemas cardiovasculares, arritmias cardiacas permanentes, que ponen en riesgo su vida y su integridad.
Centenares de organizaciones de la sociedad civil, Iglesia Católica, cuerpos diplomáticos del mundo se han pronunciado en favor de la libertad plena e inmediata de Javier Tarazona, y se alerta una vez más al mundo sobre el peligro que corre su vida en medio de su arbitraria detención.