Un adolescente de 16 años mató a su propio padre, hirió a su hermanastro de un disparo en la cara y, finalmente, se suicidó. El segundo fue trasladado a un hospital de la zona, donde fue atendido de inmediato: se encuentra fuera de peligro.
El crimen fue cometido en Buenos Aires, Argentina,. El adolescente fue hasta el comedor de su casa y tomó una pistola Bersa Thunder calibre 22. Acto seguido, asesinó a su papá, Michel Ferrufino Veizaga, de 51 años.
El disparo alertó a su hermanastro Agustín Vargas, de 23 años, que estaba en la parte de arriba de la casa, en su habitación. Bajó a toda velocidad a la planta baja, donde estaba el adolescente con un arma en su mano junto al cadáver de su padre.
“Vamos a matarnos juntos”, le dijo a su hermanastro, a la vez que lo apuntaba con el arma. Segundos después le disparó en forma directa a su rostro, con la fortuna de que no llegó a matarlo. Él creyó que lo había ejecutado y, por ese motivo, decidió quitarse la vida con la misma pistola.
La herida de bala que recibió su hermanastro, según revelaron fuentes cercanas a la investigación fue a la altura del pómulo izquierdo. Como estaba con vida, logró comunicarse con el 911 para pedir ayuda inmediata. Policías acudieron rápidamente al lugar, donde se encontraron con la escena del crimen.
El joven fue trasladado de urgencia al Hospital Santa Marina, donde fue intervenido por la herida de bala. En estos momentos se encuentra internado, pero fuera de peligro: la operación fue todo un éxito.
Cactus24/15-07-2021
