Un cocinero que trabajaba en un salón de bodas en la gobernación iraquí de Dohuk, en el norte del país, murió pocos días después de caer accidentalmente en una gigantesca olla.
Muhammed Ismail, padre del fallecido, relató que su hijo, Issa, perdió el equilibrio al desplazarse por la cocina mientras trabajaba en un banquete que sería servido durante un evento.
La víctima, de 25 años de edad, fue trasladada a un hospital, sin embargo, sus lesiones eran demasiado graves y falleció a los cinco días de ser internado.
La víctima, comentó otro de sus familiares, tenía ocho años de experiencia como cocinero preparando menús para grandes eventos.
Asimismo, señaló que el joven era el padre de dos niñas y de un bebé de seis meses, por lo que durante el último par de años tenía dos empleos en distintos salones para eventos .
“Ha trabajado como cocinero durante ocho años, donde cocinaba comida en bodas, funerales y diversas ceremonias. Durante los últimos dos años estuvo trabajando en salones de fiestas”, señaló un familiar identificado como Zervan Hosni.
Cactus24/30-06-2021