El vicepresidente de Paraguay, Hugo Velázquez, abogó este martes por la unidad ante la crisis sanitaria que motiva las protestas callejeras y afirmó que no es momento de buscar su renuncia y la del presidente Mario Abdo Benítez a través del juicio político que quiere impulsar la oposición.
Velázquez admitió además las falencias del Gobierno en materia de política sanitaria, en un contexto de pandemia y desabastecimiento de insumos que la semana pasada originaron las mayores movilizaciones ciudadanas contra el Ejecutivo de Abdo Benítez.
«Evidentemente que llegamos a una situación en que la ciudadanía está harta en la poca solución que estamos dando en materia de salud y eso es lo que tenemos que mejorar», dijo Velázquez a los medios a su salida de una reunión con Abdo Benítez en el Palacio de Gobierno.
Velázquez y el presidente del Senado y por ende del Congreso, Óscar Salomón, del gobernante Partido Colorado, fueron recibidos por el jefe de Estado tras completarse la pasada noche la cuarta jornada de protestas ciudadanas en Asunción para exigir la renuncia del Gobierno por el manejo de la pandemia.
El Partido Liberal, el mayor de oposición, acordó el lunes promover un juicio político a Abdo Benítez y Velázquez en la Cámara de Diputados, pese a que toda la oposición cuenta con menos de 40 votos de los 53 que hacen falta para que la iniciativa sea votada en el Senado.
«Yo no creo que (un juicio político) sea el momento adecuado en la situación en que estamos en el país, creo que lo que tenemos que hacer es ponernos de acuerdo todos los sectores políticos, la sociedad, y estirar el carro para mejorar la situación», resaltó Velázquez.
Las denuncias del gremio de enfermeros ante la falta de insumos en los hospitales forzaron la salida del ministro de Salud, Julio Mazzoleni, y luego, tras las masivas protestas ciudadanas, Abdo Benítez anunció varios cambios en los ministerios, algunos de cuyos nuevos responsables no han sido todavía designados.
En este sentido, Velázquez señaló que el mandatario «se está tomando su tiempo para no equivocarse en las personas que va a poner (…) porque sería peor que haga los cambios y después finalmente vuelva a fracasar».
Abdo Benítez confirmó este lunes a Julio Borba en la cartera de Salud, tras designarlo desde el viernes pasado de forma interina; a Hernán Hutteman como jefe de Gabinete y a Carmen Marín como ministra de Unidad de Gestión de la Presidencia, entre los cambios que acometió para acallar el descontento social.
Está pendiente la designación de un nuevo ministro de Educación y de la Mujer, después de que Abdo Benítez pidiera el sábado la puesta de sus respectivos cargos a los miembros de su Gabinete en medio de la crisis.
CONFIANZA DEL PUEBLO
Velázquez reconoció la legitimidad de las demandas de los cientos de jóvenes que a diario protagonizan las marchas y que suelen acabar en represiones por actos vandálicos de grupos radicalizados.
Pero recordó que «el presidente de la República y el vicepresidente fueron electos por el voto de 1,2 millones de paraguayos».
«A esa cantidad tenemos que escuchar», apuntó.
«Hay un pueblo que sigue confiando en nosotros, que es la mayoría. Hay descontentos, tenemos que mejorar, pero de ahí a que todos ustedes lleguen a la conclusión de que todo un pueblo está detrás, están equivocados», reafirmó a los periodistas.
En el primer año del actual mandato presidencial (2018-2023), Velázquez y Abdo Benítez consiguieron bloquear un primer intento opositor por un polémico acuerdo energético con Brasil que fue anulado tras filtrarse su contenido.
Cactus24 09-03-21