Fueron segundos, pero la escena se convirtió en símbolo de la violenta insurrección en el Capitolio de simpatizantes del presidente estadounidense, Donald Trump. Un hombre disfrazado de bisonte, con un gorro con cuernos y sin camiseta presidió momentáneamente el Senado de EE.UU., puño en alto, en medio del caos.
Esta rocambolesca secuencia la protagonizó Jake Angeli, un miembro del movimiento de teorías de la conspiración Qanon que se hace llamar «Yellowstone Wolf» en su canal de YouTube, en el que defiende que existe una supuesta red de pornografía infantil y tráfico sexual de menores dirigida por los demócratas, entre otras ideas.
Su presencia en el Capitolio se hizo viral en las redes sociales y llamó la atención de miles de personas, que se preguntaron de dónde salía este personaje, que fue entrevistado por la agencia de noticias Efe en noviembre. La imagen tomó tanta fuerza que varios medios nacionales e internacionales se refirieron a Angeli como uno de los líderes de la ocupación del Congreso estadounidense.
Sus inicios en Arizona
Natural de Phoenix (Arizona, EE.UU.) Angeli, de 27 años, atendió a Efe en los días posteriores a las elecciones presidenciales de EE.UU. del pasado 3 de noviembre, frente del centro de votación y conteo del condado de Maricopa, en ese estado.
«Yellowstone Wolf» se describió a sí mismo como un «elegido» enviado por Qanon, un grupo formado en foros de internet y que ha sido etiquetado por el FBI como potencial amenaza de terrorismo doméstico.
Lejos de hablar de violencia y con una sonrisa de oreja a oreja, Angeli explicó que su deber es «informar» a la comunidad de los diferentes escándalos que supuestamente esconde el Partido Demócrata, como la trata de personas, la injerencia en el Gobierno estadounidense, o el fraude electoral en contra de Trump.
Se compara con Ghandi o Jesús
Pese a que había sido visto en otras concentraciones a favor del mandatario republicano, los días de protesta enfrente del centro de conteo de votos en Maricopa fueron su primera gran aparición pública, en la que captó la atención de grandes medios del país.
En ese contexto, argumentó que su intención era «defender los votos de Trump en Arizona» mediante la «desobediencia civil», como hicieron otros grandes líderes históricos.
«Estamos haciendo frente a la narrativa global de que Biden ganó mediante desobediencia civil, como Gandhi, Jesús, o Martin Luther King hicieron», dijo, con la cara pintada de la bandera de EE.UU.
Retórica que funciona
Su mensaje en directo caló entre los seguidores de Trump presentes en esas protestas en Arizona, en parte, por su alta capacidad de retórica y una voz áspera, pero singular. Así, se convirtió en uno de los oradores principales de cada acto en Phoenix durante esa semana, ya fuese delante de ese centro de votación, el Ayuntamiento o el Capitolio estatal. Esas repetidas actuaciones le llevaron a ser uno de los protagonistas de la «defensa de los votos» de Trump, al nivel del presentador de radio ultraconservador Alex Jones.
En menos de dos meses, Angeli pasó de los jardines del Capitolio de Arizona a la conocida explanada del Capitolio de Washinton D.C., en la que también dio varios discursos antes de la insurrección, según varios perfiles de redes sociales. Tras entrar en el edificio federal y alcanzar el Senado con sus compañeros, «Yellowstone Wolf» presidió momentáneamente la Cámara Alta, protagonizando una imagen que pasará a la historia. (EFE)
Cactus24/07-01-2021