David Orlando Rangel, de 36 años de edad y Yolis del Carmen Delgado, de 30 años de edad, fueron asesinados el pasado 6 de agosto, a ellos los habrían matado de múltiples heridas por arma de fuego, pero “Davicito”, como era conocido el hombre, lo decapitaron y no localizaban su cabeza.
Por más de tres días funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) pesquisaron la zona donde fueron conseguidos los cadáveres, hacia un buco ubicado en Carorita al norte de Barquisimeto, estado Lara, pero no dieron con ella.
Sin embargo los sabuesos paralelamente trabajaban el caso y obtuvieron buenas pistas de quienes habían cometido el doble homicidio.
“El Popa” fue uno de los apodos que salieron a relucir y que posteriormente lo identificaron como Edwin Rivero, de 28 años de edad y quien habría actuado junto a dos sujetos más, conocidos como “Rubén” y “El Catire”.
Los funcionarios del Eje de Homicidios dieron con “El Popa” y lograron detenerlo y posterior a un interrogatorio este los condujo a la casa de Carlos Palencia Conrrado, conocido como “El Brujo”, ubicada en Carorita, zona norte de la ciudad.
“El Brujo” no se encontraba en la casa en el momento del allanamiento, pero el sujeto habría recibido la cabeza de manos de los asesinos y con ella procedieron hacer un ritual.
Como parte del ritual la cabeza fue enterrada en la vivienda de “El Brujo”, allí la desenterraron y además encontraron todos los utensilios usados para hacer el rito.
Los sabuesos del Eje de Homicidios del estado Lara, están tras la pista de “El Brujo”, “Rubén” y “El Catire”, quienes actualmente se encuentran prófugos de la justicia.
Cactus24/12-10-2020
