Hember Miguel Flores Castro, de 22 años de edad, es el nombre del joven que resultó herido con perdigones en el rostro durante un presunto motín ocurrido el 17 de septiembre del 2019 en las instalaciones del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) en San Juan de Los Morros, estado Guárico.
Hember Miguel estuvo recluido en el Hospital del estado Guárico durante 21 días y fue sometido a una intervención quirúrgica. Le extrajeron 16 perdigones del ojo izquierdo y uno de los proyectiles quedó en su interior, pero solo le suturaron la herida y le dieron el alta médica, según relató su madre Daisy Castro.
La víctima perdió el ojo izquierdo en su totalidad y no puede abrir el ojo derecho, por lo que desde ese momento quedó bajo la condición de discapacitado. A pesar de su crítico estado de salud, Hember Miguel fue devuelto a los calabozos pero esta vez lo trasladaron hasta la avenida Brito Figueroa, donde está ubicada la sede principal del CICPC Guárico.
Los dolores que padece Hember Miguel son constantes, ya que ningún medicamento le calma el dolor, explicó la señora Castro al equipo del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP). Es por este motivo que, transcurridos tres meses del hecho, la abogada del joven solicitó una medida humanitaria, pero ésta y otra más que pidió tiempo después fueron rechazadas por el tribunal que lleva la causa.
Los meses pasaron y el joven no mostró mejoría. Este año le realizaron una tomografía que fue evaluada por un médico forense, quien le diagnosticó una infección ocular que llegó hasta los pómulos, por lo que un tribunal le otorgó una orden para ser trasladado a una nueva consulta médica.
Hember Miguel debe ser sometido nuevamente a una intervención quirúrgica, en la que los médicos tienen dos opciones vaciar por completo el ojo izquierdo o colocar una prótesis, además de tratar de salvarle el ojo derecho. No obstante, hasta la fecha no ha sido trasladado a un centro de salud bajo el alegato de que no hay vehículos para este tipo de traslados en el CICPC.
“Déjenlo en su tierra”
En horas de la mañana de este 26 de junio se conoció de un traslado del CICPC Guárico hacia la Comunidad Penitenciaria Fénix Lara, al Centro de Formación Hombre Nuevo Libertador y el Internado Judicial de Anzoátegui, mejor conocido como Puente Ayala.
En esa lista de traslados, específicamente para Fénix Lara, se encontraba Hember Miguel, a pesar de que éste muchacho tiene días padeciendo fiebre alta, recibe tratamiento y cuidados médicos especiales.
El recluso discapacitado se encuentra detenido desde 2018 y, tras asumir los hechos, fue condenado a 11 años de prisión. Actualmente cumple tres años en los calabozos del CICPC.
En otro orden de ideas, la madre del joven manifestó que no se trata de impedir su traslado a un centro penitenciario, sino que éste sea efectuado en un recinto más cercano a sus familiares como lo es el Centro Penitenciario 26 de Julio en el estado Guárico.
“Mi hijo debe ser curado cada tres horas, al principio lo hacía yo y ahora me ayuda una joven detenida. Cada tres horas deben lavar sus ojos, suministrarle los medicamentos y además colocarle unas gotas, eso no lo van hacer en ese penal. Me lo van a mandar para el otro lado del mundo a morirse y ahora con esta pandemia uno no se puede mover”, comentó la afligida madre.
En tanto, la madre hace responsable a la ministra Iris Valera, titular del Ministerio de Asuntos Penitenciarios por lo que pueda sucederle a su hijo durante y después del traslado. Añadió además que la abogada del reo conversó en una oportunidad con la ministra, pero no recibió ningún tipo de respuesta, como tampoco se han manifestado la Vicepresidencia de la República y la Defensoría del Pueblo en Caracas que están al tanto de éste caso.
“Ella (Iris Valera) fue incapaz de decir A y entonces ahora si manda una autorización de traslado para mandarlo al otro lado del mundo. Para eso si habla, en vez de ver como estaba, porque eso que le pasó a mi hijo lo hizo un funcionario del Gobierno”, enfatizó la señora Castro.
Es de resaltar que los familiares se enteraron del traslado por terceras personas, pues no fueron informados formalmente por el organismo policial que lo alberga. En horas del mediodía de este viernes, el recluso fue trasladado junto a otros cinco reos a otro sitio para efectuarles una evaluación médico forense y una prueba rápida de Covid-19, requisitos indispensables para ingresar a un recinto penitenciario.
Carolina Girón, directora del Observatorio Venezolano de Prisiones, manifestó su preocupación por este caso, al cual se le ha hecho seguimiento desde el primer día.
“En esas condiciones este joven debería estar recibiendo atención médica inmediata. Además de la ubicación de sus familiares, quienes son los que le proporcionan atención médica, el tribunal que lleva su causa está en el estado Guárico, por lo que no debería ser trasladado fuera de la jurisdicción”, sentenció Girón.
NP OVP
CACTUS24 26-06-20