Un equipo de científicos australianos ha publicado un llamativo estudio titulado “Reproducción Suicida”, editado por la revista especializada en ciencias, Zootaxa.
El hallazgo ha sorprendido a la comunidad científica, puesto que, básicamente, los científicos descubrieron que los antequinos mueren por exceso de sexo.
Los antequinos son marsupiales de aspecto muy similar a los ratones, que viven en los bosques de Australia y Tasmania. Estos curiosos animales tienen un singular comportamiento sexual: el antequino macho se aparea y muere tras copular de manera frenética. En palabras del investigador Jeff Corwin, “literalmente se convierten en un marsupial zombi”.
Los antequinos machos se concentran tanto en el apareamiento que sus niveles de hormonas del estrés se elevan a niveles muy peligrosos. Esto genera que sus sistemas inmunológicos colapsen y sean presas fáciles para cualquier tipo de infección o parásito. Los antequinos han vivido así por millones de años.
Como consecuencia de su comportamiento sexual, los machos suelen morir a los 11 meses de edad, mientras que las hembras llegan hasta los 3 años.
Cactus24 (01-08-2019)