Si algunos se han vuelto unos matemáticos, más allá de los profesores que dictan la cátedra, son los conductores que con una semana de anticipación hacen cola para surtir de gasolina sus vehículos en la Estación de Servicio El Isiro, en la prolongación de la avenida Manaure con variante José Leonardo Chirinos de Coro.
Una semana de espera según los números de terminales de placas, los números del 1 al 200 en lista, los 40 litros por cada vehículo que dan un total de 8.000 litros, dos mil menos de los que trae la gandola… tal contexto dio argumentos para quejarse este miércoles ante la gerencia y llevar a cabo una protesta en la que intercedieron hasta tres organismos de seguridad, más la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
La intención de reducir el número de vehículos a surtir fue el detonante de que los últimos 50 o 60 que estaban quedando por fuera, llevaran a cabo la protesta y toma de las instalaciones por breves instantes.
Según expusieron algunos conductores, la aparente reducción de los vehículos a surtir y disminución del litraje era para destinar parte del litraje a los apoyos, algo con lo que no estaban de acuerdo.
No obstante, la situación no trascendió a mayores y se aplacó cuando la Policía Nacional Bolivariana comenzó a revisar uno a uno los documentos de los vehículos en cola para asegurarse que ninguno tuviese placas de otro y surtiendo en el día que no correspondía.
Para algunos conductores esto es positivo pues, ya que se evitan irregularidades y se contiene a quienes aprovechándose de la «viveza criolla» estarían usando diferentes placas para acceder de manera más regular al combustible. Para otros fue un control para desviar la atención y dispersar de manera estratégica la protesta.
CACTUS24 28-06-23
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