Kevin, de 23 años, no permaneció ni siquiera 24 horas en Estados Unidos. Junto con tres amigos cruzó el río Bravo, rodeado por decenas de migrantes que llevaban niños en los hombros. Una vez que pusieron un pie en este territorio fueron detenidos por agentes de la patrulla fronteriza que los trasladó a un centro de procesamiento.
“Nos cruzamos a las 6.00 de la mañana, más o menos, por ahí por donde se puede pasar caminando. Para las 8.00 de la mañana de hoy ya estábamos de regreso, ni un día duré allá”, destacó.
El caraqueño explicó que una vez que se entregan los trasladan a una oficina donde les piden sus datos, les quitan sus pertenencias y únicamente les permiten conservar los documentos de identificación. “Te dicen que sí te vas a quedar, que ya la hiciste y luego para atrás. Hoy nos subieron a un camión y vimos que ya íbamos para México. Todos nos pusimos tristes”, declaró a El Sol de México.
Como escudos
Los niños fueron prácticamente el pase para que el grupo de migrantes que se había quedado atorado entre la orilla del río Bravo y la alambrada de púas pudieron ingresar a Estados Unidos, aunque sea por unas horas. Personal del Instituto Nacional de Migración (INM) impide esa meta.
La estrategia que sí les funcionó fue pasar a los niños por encima de los alambres con púas, lo que de alguna manera, sensibilizó a los agentes de la patrulla fronteriza que terminaron por tomar a los pequeños mientras que los adultos se adelantaban a cruzar. Para protegerse de las púas, lanzaron toallas sobre la alambrada o playeras con la esperanza de recibir menos heridas.
Después de 90 minutos de lucha terminaron por ingresar al país gobernado por Joe Biden, no de forma libre, ya que de inmediato fueron trasladados a los camiones que la autoridad fronteriza tiene en el lugar para llevarlos a un centro de procesamiento y posteriormente retornarlos a México.
Blindaje en la frontera
Este jueves, las autoridades de los Estados Unidos (EE.UU.) y estados fronterizos desplegaron durante las últimas horas a 24.000 efectivos en la frontera sur con el propósito de frenar la ola de migrantes que se espera a partir de esta medianoche, cuando vence el Título 42 y entra en vigor nuevamente el Título 8.
Según el reporte, el Departamento de Defensa envió 4.000 elementos, la Patrulla Fronteriza y otras agencias federales destinaron 10.000 y el gobernador de Texas, Greg Abbott, desplegó 10.000 efectivos de la Guardia Nacional.
El Gobierno estadounidense estimó que El Paso, Brownsville y Laredo serán puntos críticos y calcularán la llegada de hasta 12.000 migrantes por día, cifra que supera su capacidad para aceptarlos o deportarlos.
Agencias
Cactus24 (12-05-2023)