La Bolsa de Santiago, la principal plaza bursátil de Chile, se desplomó un 9,6 % en su apertura tras los históricos comicios en los que los chilenos castigaron a los partidos políticos y decidieron que la nueva Constitución la redacte una convención con gran presencia de independientes.
La derecha oficialista -más partidaria de mantener el mismo modelo económico, con un Estado subsidiario en la provisión de servicios básicos- es la gran perdedora, pues no consiguió el tercio de los 155 escaños que necesitaba para influir en la redacción del nuevo texto que sustituirá al actual, vigente desde la dictadura militar de Augusto Pinochet entre 1973 y 1990.
Cactus24 17-05-21