Michael Hernández, el tristemente célebre asesino que a los 14 años mató a un compañero de clase adolescente en el baño de la Secundaria Southwood en Florida EE:UU., ha muerto en prisión, según registros.
Tenía 31 años. No estaba claro de inmediato cuál fue la causa de la muerte. Un portavoz del Departamento de Prisiones de la Florida no devolvió el sábado una llamada telefónica en busca de declaraciones.
Los hechos ocurrieron en febrero de 2004, cuando Hernández atrajo a su amigo Jaime Gough también de 14 años, a un baño en la escuela intermedia Southwood al sur de Miami. Apuñaló a Jaime más de 40 veces en un caso que conmocionó al sur de Florida y a la nación, según reseña el Nuevo Herald.
“Era una persona malvada, muy malvada, que no mostró remordimiento”, dijo la ahora retirada fiscal Gail Levine, quien supervisó la audiencia de sentencia de Hernández. “Finalmente, se completó la justicia”.
Jorge Gough, el padre de Jaime, dijo el sábado que estaba “conmocionado” al recibir la noticia de los fiscales. “No esperaba esto en absoluto”, dijo Jorge Gough.
