Un recluso, que permanece sin identificación en la morgue del Hospital de Cabinas, murió, la madrugada del 14 de octubre, sus compañeros lo acomodaron en una camilla improvisada y lo lanzaron a la avenida Andrés Bellos, sector La Misión del municipio Cabimas.
El cuerpo permaneció algunas horas frente al Centro de Arresto y Detenciones Preventivas de Cabimas, hasta que se concretó el traslado a la morgue.
Según la denuncia de ONG «Una Ventana a la Libertad», el 14% de la población del penal padece algún tipo de patología que pone en riesgo la vida de los privados.
«La sumatoria de todos los detenidos con algún tipo de padecimiento equivale a 145 privados, es decir, 14 por ciento de la población. Uno de los detenidos denunciantes aclara que no todos padecen tuberculosis, pero en su mayoría ‘si están desnutridos, bajos de peso o comen cuando mucho una vez al día’”, detalló, en su portal, la ONG.
Los presos del retén de Cabinas salieron, el 28 de septiembre de 2020, a la calle para exigir comida, agua y medicinas.
La manifestación, en la que participaron unos 150 internos, duró cinco horas. Luego de que las autoridades permitieran el ingreso de provisiones, los detenidos volvieron al penal. Al día siguiente, Omar Prieto, gobernador de Zulia, desmintió los motivos de la protesta de los presos y aseguró que ese centro de detención será clausurado. Esta medida de cierre la anuncia el ejecutivo regional desde septiembre de 2019.
Sobre los detenidos, familiares y custodios, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó, en febrero de 2020, una medida de protección por las pésimas condiciones del penal. Pese a esa resolución, se han reportado en los últimos meses el deceso de seis privados de libertad.
Cactus24/20-10-2020
