El primer ministro dimisionario de Irak, Adel Abdelmahdi, condenó el ataque que Estados Unidos realizó esta madrugada en Bagdad y que acabó con la vida de Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución de Irán, y de un líder de la milicia chií iraquí Multitud Popular.
En un comunicado aseguró que «llevar a cabo operaciones de ajuste de cuentas contra figuras de liderazgo iraquíes y de un país hermano en suelo iraquí constituye una violación flagrante de la soberanía iraquí y un ataque a la dignidad del país».
Asimismo, advirtió de que esta acción representa «una escalada peligrosa que enciende una guerra destructiva en Irak, en la región y en el mundo».
La Multitud Popular informó de que el vehículo en el que viajaban los dos cabecillas fue blanco de un bombardeo estadounidense en la carretera del aeropuerto internacional y el Pentágono confirmó poco después el ataque, que buscaba «disuadir» futuros planes de Irán contra intereses norteamericanos en Oriente Medio.
Abdelmahdi también denunció que el ataque contraviene las condiciones y el papel de las fuerzas de EEUU desplegadas en Irak, recordando que su cometido es entrenar a las tropas iraquíes y luchar contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI), «bajo la supervisión y con la aprobación del Gobierno iraquí».
El primer ministro, que presentó su dimisión a finales de noviembre en el marco de la crisis que sacude Irak, ofreció además sus condolencias por la muerte de Al Mohandes y Soleimani, a los que calificó de «grandes símbolos de la victoria frente al EI».
Las milicias progubernamentales Multitud Popular desempañaron un papel destacado en la lucha contra el EI en Irak, donde fue derrotado territorialmente a finales de 2017, aunque todavía sus combatientes tienen presencia en algunas zonas del país y llevan a cabo atentados de forma esporádica.
Esa agrupación armada integrada principalmente por batallones chiíes ha actuado bajo el mando de las fuerzas regulares de Irak, que a su vez se coordinan con las estadounidenses para hacer frente a los extremistas en el marco de la coalición internacional capitaneada por Washington.
Sin embargo, EE.UU. responsabiliza al grupo Kata’ib Hizbulá, que opera bajo el paraguas de la Multitud Popular, del frecuente lanzamiento de proyectiles y cohetes contra intereses estadounidenses en suelo iraquí en los pasados meses, lo que ha llevado a una escalada de la tensión que ha culminado en el ataque de este viernes.
Cactus24 03-01-20