Corea del Norte y Corea del Sur están formalmente en guerra, pero un selfie tomado ayer durante los Juegos Olímpicos trajo un momento de paz a la península.
Los atletas de Corea del Norte y Corea del Sur, que terminaron segundo y tercero respectivamente en la prueba de dobles mixtos de tenis de mesa detrás de China, posaron en el podio después de la ceremonia de premiación para una selfie tomada por el surcoreano Lim Jong-hoon (que jugó con Shin Yu-bin), usando un teléfono móvil Samsung, el gigante tecnológico surcoreano.
“Los felicité cuando los presentaron como medallistas de plata”, dijo Lim a los medios, refiriéndose a los atletas norcoreanos. La selfie fue ampliamente difundida por las estaciones de televisión de Corea del Sur. “Este es el verdadero espíritu de los Juegos Olímpicos”, dijo un comentarista.
Durante la ceremonia de apertura de los Juegos, Corea del Sur fue presentada como República Popular Democrática de Corea, el nombre formal de Corea del Norte, que luego se repitió (esta vez correctamente) cuando la delegación norcoreana hizo su entrada.
Dirigiéndose al comité organizador francés y al Comité Olímpico Internacional, el Ministerio de Deportes de Corea del Sur expresó su “pesar por el anuncio” y solicitó una reunión con el presidente del COI, Thomas Bach.
Nadie hubiera imaginado que pocos días después los atletas de ambos países compartirían el podio sin problemas.
En 2018, en los Juegos de Invierno de PyeongChang, las dos delegaciones acudieron juntas (y en un caso incluso compitieron juntas), pero posteriormente, debido a la pandemia, Corea del Norte decidió no enviar atletas a Tokio 2020, y hace dos años tampoco participó en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín.
El podio de tenis de mesa de ayer es por tanto el primero que consigue Corea del Norte en ganar una medalla desde los Juegos de 2016 en Río de Janeiro (Brasil).
Durante la conferencia de prensa posterior a la ceremonia de premiación, los dos campeones chinos ganadores del oro felicitaron a los jugadores norcoreanos, calificándolos de «orientes formidables».
«Aprendimos del equipo chino, que siempre es el número uno», dijo el norcoreano Kim Kum-yong. «Lo haremos mejor la próxima vez para ganar el oro».
La pareja norcoreana no confirmó los rumores de que entrenaron en China antes de los Juegos Olímpicos, una historia que circula en línea según algunos periodistas.
Casi hacia el final de la conferencia, al equipo norcoreano se le preguntó si sentía «rivalidad» hacia sus oponentes surcoreanos, que luchaban por el tercer puesto contra otro equipo asiático, el de Hong Kong.
Kim tomó la iniciativa de responder y dijo: “No, no lo hicimos”.
CACTUS24 (31-07-24)
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