Lisa Pisano, de 54 años, a quien el pasado 12 de abril le trasplantaron un riñón de un cerdo, murió en un hospital de Nueva York.
En dos procedimientos realizados durante nueve días a principios de abril, Pisano recibió una bomba cardíaca y luego un riñón de cerdo y un timo.
Pisano, de Nueva Jersey, padecía insuficiencia cardíaca y enfermedad renal terminal, la última de las cuales requería tratamiento regular con diálisis. Sin embargo, no calificaba para un trasplante combinado de corazón y riñón debido a sus múltiples condiciones crónicas.
Ante la escasez de órganos humanos compatibles, los médicos de Langone Health de la Universidad de Nueva York exploraron alternativas innovadoras.
Dada la urgencia de la situación, el equipo médico decidió implantar una nueva bomba cardíaca mecánica, conocida por sus siglas (DAVI), para ayudar a Lisa a sobrellevar su insuficiencia cardíaca mientras se buscaba un riñón funcional.
Este caso representa únicamente el segundo trasplante de un riñón de cerdo modificado genéticamente a un paciente vivo, siendo además el primero en incluir la combinación con el timo.
Al no disponer de un riñón humano, el equipo quirúrgico de Pisano buscó órganos de cerdos editados genéticamente para hacerlos compatibles con su sistema inmunológico.
CACTUS24 09-07-24