El Tribunal Supremo de España determinó que los besos sin consentimiento expreso o tácito debe ser considerado como un delito de agresión sexual.
El dictamen se originó luego que se condenara a un año y nueve meses de prisión a un agente policial por besar sin consentimiento a una detenida en enero de 2020.
De acuerdo a la justicia española, el acto de besar sin consentimiento significaría una “intromisión en la libertad sexual” de la víctima con el propósito de “obtener una satisfacción sexual a costa de otro”.
“Un ataque personal a su intimidad y libertad sexual de consentir o no consentir quién pueda acercarse a la misma para hacer un acto tan íntimo y personal como es darle un beso”, señalaron los magistrados.
Cactus24 (26-06-2024)
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