Una mujer de Phoenix (EEUU) fue por presuntamente acosar a un hombre con el que había tenido una sola cita le envió más de 159.000 mensajes de texto, incluidos algunos con amenazas de violencia y desmembramiento.
En el momento de su arresto en mayo de 2018 por cargos de acoso y allanamiento de morada, la policía dijo que Jacquelyn Ades, de 31 años, envió a la víctima 65.000 mensajes de texto en el transcurso de 10 meses.
Ahora The Arizona Republic , que ha revisado informes policiales y grabado entrevistas policiales, ha informado que el número de misivas, muchas de ellas de naturaleza sádica, fue más del doble.
Los dos salieron juntos una vez, pero el hombre quie es un empresario no estaba interesado en tener una relación con Ades, según los documentos. Pese a ello, la mujer siguió enviándole mensajes de texto, en ocasiones hasta 500 por día.
El empresario contactó a la policía en julio de 2017 cuando vio a Ades estacionada afuera de su casa en Paradise Valley.
Al poco tiempo, Ades supuestamente comenzó a inundar el objeto de su aparente obsesión con mensajes cada vez más amenazantes, incluido uno que decía: «Haría sushi con tus riñones y palillos con los huesos de tus manos».
Otro texto inquietante decía: «Usaría tu fascia en la parte superior de tu cráneo, en tus manos y en tus pies».
La fascia es una fina capa de tejido fibroso que encierra músculos y órganos.
Una tercera misiva amenazadora decía: ‘¡Oh, qué haría con tu sangre!’ Me gustaría bañarme en élla.
Los registros de arresto de Ades indican que la mujer «mostraba signos de enfermedad mental».
En abril de 2018, la víctima estaba revisando de forma remota el video de vigilancia de su casa cuando vio a Ades.
Los agentes de policía acudieron al domicilio y encontraron a la mujer de 31 años bañándose en la bañera del hombre.
Cuando la policía registró el coche de Ades, encontró un gran cuchillo de carnicero en el asiento del pasajero.
Cuando la policía le pidió que explicara su presencia dentro de la casa del hombre, Ades respondió: «Supongo que me inventé todo un escenario en mi cabeza donde vivo aquí, así que vine aquí y fingí que eso era lo que estaba pasando».
En mayo, Ades se presentó en el negocio del hombre en Scottsdale haciéndose pasar por su esposa, lo que finalmente llevó a su arresto en Phoenix.
Después de ser detenida, Ades aseguró a la policía que no tenía intención de lastimar al hombre y dijo que «algo se apoderó de ella» cuando envió los mensajes de texto amenazantes.
Cactus24 (10-04-2024)
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