Gracias a que Aquaman fue un éxito en taquilla y entre los fans de Jason Momoa, su secuela era una de las películas más esperadas de DC, una que podría poner a salvo a la marca que se encontraba en una situación muy complicada.
El público puede tener muchas quejas sobre el lugar de Zack Snyder en la historia de DC en el cine, pero su trabajo no siempre fue un problema, pues gracias a él llegaron actores interesantes a la franquicia. Uno de los nombres más importantes fue el de Jason Momoa, ya que el intérprete llevaba tiempo buscando una forma de levantar su carrera en Hollywood. A pesar de no ser similar al famoso personaje de los cómics, su apariencia y personalidad lo convirtieron en uno de los favoritos de los espectadores, estuvieran o no a favor del Snyderverse.
Una secuela era el siguiente paso lógico, pero dentro de Warner Bros. Discovery las cosas nunca son tan simples. James Wan regresó para filmar esta historia que ya tenía en mente desde que trabajó la primera parte y en la que quería poner al frente la relación entre Aquaman y Ocean Master.
Wan aseguró a los fans que la próxima secuela, que se supone será la última película en la línea de tiempo del DCEU antes de que James Gunn la reinicie con Superman: Legacy en 2025.
La secuela se trabajó mientras Warner Bros. pasaba por muchos cambios internos, primero por la salida de Snyder y la llegada de Walter Hamada, luego por la compra de Discovery, y finalmente por la presencia de David Zaslav como CEO que buscaba una renovación completa. De un momento a otro, la secuela pasó de ser uno de los proyectos más esperados de la compañía a ser uno de los títulos más complicados para hacer la transición con el nuevo universo a cargo de James Gunn y Peter Safran.
La producción de Aquaman y El Reino Perdido no fue nada sencilla pues tuvo que responder y adaptarse a las necesidades de distintos jefes, lo que causó mucha preocupación entre los fans que no querían ver una obra llena de reshoots mal ejecutados y una mala edición. A pesar de estos problemas, y de todas las presuntas controversias asociadas a Amber Heard y su experiencia durante la filmación, la cinta todavía tiene una posibilidad de brillar en cartelera gracias a los fans de Momoa.
¿De qué trata Aquaman y el Reino Perdido?
Tras fallar en su venganza contra Aquaman, Black Manta encontrará una oportunidad única para cumplir con su objetivo al apropiarse del Tridente Oscuro que pondrá en peligro Atlantis y al resto del mundo. Al reconocer que no puede con esta tarea él solo, Aquaman buscará la ayuda de su hermano, Ocean Master, a quien debe sacar de la prisión en la que lo encerraron tras los eventos de la primera película.
Este viaje servirá para acercarlos como familia y para reconocer lo bien que se pueden complementar cuando es necesario, pero no será nada fácil por su complicado pasado y el nuevo poder que tiene su enemigo en común.
Aquaman y El Reino Perdido se estrenará el próximo 22 de diciembre y todo indica que no tendrá un gran paso por la taquilla incluso si no tiene mucha competencia.
