Cuando Adele estrenó su sencillo de 2011 “Someone Like You”, su balada agridulce resonó en millones de personas en todo el mundo. Más de una década después, sigue siendo una de sus canciones más populares. Su arte, así como el de muchos otros que han dominado el arte de tocar las fibras sensibles de nuestro corazón con latidos lentos y emocionales, tiene una manera de manejar el dolor emocional del desamor y la pérdida.
No hay duda de que la música puede calmar el alma de algunas personas, y resulta que también podría ser un calmante temporal para el dolor físico.
Escuchar canciones favoritas podría reducir la percepción del dolor por parte de las personas, según un nuevo estudio publicado el miércoles en la revista Frontiers in Pain Research . Y se descubrió que los analgésicos más eficaces eran las canciones tristes que detallaban experiencias agridulces y emocionales.
«No reemplaza al Tylenol cuando tienes dolor de cabeza, pero la música puede ayudar a aliviarlo», dijo Patrick Stroman, profesor de ciencias biomédicas y moleculares en la Universidad Queen’s en Kingston, Ontario. No participó en el último estudio, pero realizó su propia investigación sobre la relación entre el dolor y la música. A diferencia de otros medicamentos, señaló, escuchar música no tiene efectos secundarios ni riesgos (simplemente mantenga el volumen a un nivel razonable).
El pequeño estudio invitó a 63 adultos jóvenes a traer dos de sus canciones favoritas, y el único requisito era que tuvieran al menos 3 minutos y 20 segundos de duración. Una selección representaba su música favorita de todos los tiempos y la otra era la canción que traerían consigo a una isla desierta. Los investigadores también pidieron a los adultos jóvenes que eligieran una de siete canciones que el equipo consideraba relajantes y que no eran familiares para los participantes del estudio. (Los siete que podían elegir eran “Cotton Blues”, “Jamaicare”, “Légende Celtique”, “Musique de Film”, “Nuit Cubaine”, “Reggae Calédonien” y “Sega Mizik Kèr”).
El impacto de las canciones melancólicas
Cada persona se sometió a bloques de 7 minutos en los que se les indicó que miraran fijamente la pantalla de un monitor mientras escuchaban su música favorita, una de las siete relajantes canciones instrumentales (cada una de las cuales duró 6 minutos y 40 segundos) o una versión revuelta de ambas. canciones y la canción relajante elegida. La música revuelta era una ruidosa mezcla de las tres canciones, cortadas en fragmentos y mezcladas al azar para que carecieran de su estructura original. Un bloque de 7 minutos tenía gente sentada en silencio. Mientras tanto, los investigadores pegaron un objeto caliente, similar al dolor de una taza de té hirviendo en la piel, en la parte interna del antebrazo izquierdo de los participantes.
Al calificar sus experiencias, las personas eran más propensas a informar que sentían menos dolor al escuchar sus canciones favoritas en comparación con escuchar una canción relajante desconocida o el silencio. Las canciones revueltas tampoco redujeron el dolor, lo que los autores sugirieron era evidencia de que la música era más que una distracción de una experiencia desagradable.
Con millones de canciones disponibles, la canción favorita de una persona probablemente no sea la misma que la de otra. Después de entrevistar a los participantes sobre la canción que trajeron y su calificación de dolor, los investigadores encontraron que las personas que escuchaban canciones agridulces y conmovedoras sentían menos dolor que cuando escuchaban canciones con temas calmantes o alegres.
«Es un resultado muy interesante», afirmó el autor principal del estudio, Darius Valevicius, estudiante de doctorado en neurociencias de la Universidad de Montreal. «Creo que es algo que yo y probablemente mucha gente captamos intuitivamente por qué escuchamos música agridulce, melancólica o incluso espiritual».
La música que provoca escalofríos puede modular el dolor
Las personas que escucharon canciones agridulces también informaron más escalofríos: la emoción y los escalofríos que se sienten en la piel al escuchar música placentera. Esta sensación se asoció con puntuaciones más bajas de malestar provocado por el dolor ardiente que sintieron en el experimento. Aunque no se ha estudiado en profundidad aquí, Valevicius dijo que pensaba que esos escalofríos musicales podrían estar causando estos efectos de bloqueo del dolor.
Cactus24//28-10-2023
