Apple ha recibido el visto bueno por parte de las autoridades francesas para distribuir en el país la actualización de iPhone 12 que reducirá los niveles de las ondas de radiofrecuencia que superaron lo recomendable y motivaron su retirada del mercado.
La Agencia Nacional de Frecuencias (ANFR) francesa ha finalizado la revisión de la actualización de software facilitada por Apple para solucionar los problemas de radiación detectados a mediados de mes en el modelo iPhone 12.
El análisis realizado tiene en cuenta el contacto táctil a una distancia de 0mm (contacto con las extremidades) para la tasa de energía de radiofrecuencia que absorbe el cuerpo humano en el uso de estos dispositivos; y a una distancia de 5mm del cuerpo, con el móvil guardado en el bolsillo de una chaqueta o en un bolso.
En concreto, este organismo alertó de que iPhone 12 superaba los límites establecidos al menos en una de las dos pruebas realizadas. Así, si el límite máximo para las extremidades es de 4 vatios por kilogramo (W/kg), el dispositivo de Apple se sitúa en 5,74 W/kg. En el otro análisis no incumple la normativa, que establece el límite en 2 W/kg.