Las condiciones precarias e inhumanas en las que vive una familia de nueve integrantes en el Sector Universitario del municipio Carirubana, península de Paraguaná, ocasionaron que «el aguacero» que cayó la noche de ayer miércoles 24 de agosto los dejara prácticamente en la calle.
La señora Yenni Ramirez relató con tristeza e impotencia que «la ventolina» de anoche desprendió varias láminas del techo de su vivienda ubicada al lado del preescolar Andrés Bello, detrás de Las Casitas. «Se nos mojó y dañaron los pocos coroticos que teníamos», lamentó.
Por ser familia de bajo recursos siempre han buscado apoyo del Gobierno o los políticos, pero no ha recibido ningún beneficio que le permita -a ella y su familia- a vivir en mejores condiciones. «Pedimos apoyo a Invica y nada que atienden nuestra solicitud», dijo Ramírez.
Ella pide ayuda a quienes puedan, ya que las paredes de la vivienda están deterioradas, parte del techo no tiene láminas, los electrodomésticos se quemaron y los colchones -además de estar desgastados- se mojaron y no tienen donde dormir.
Por lo que invita a quienes deseen apoyar a contactarla por el teléfono +58 412-6684498 o dirigirse a la dirección de la vivienda donde habita «para que vean con sus propios ojos las condiciones que vivió junto a su familia», exhortó la afectada.
Cactus24//24-08-2023