El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo y aunque posee muchas propiedades y beneficios para la salud, consumirlo en exceso puede generar consecuencias para el organismo.
El Instituto Estadounidense de Medicina detalló cuáles son los problemas de salud que conllevan la ingesta de café en exceso:
Dolores de cabeza o migraña, pueden ser una de las consecuencias de la cafeína, ya que bloquea a la adenosina, ocasionando que circule menos sangre en los vasos sanguíneos del cerebro.
La cafeína puede elevar la presión arterial y ocasionar hipertensión, debido al efecto estimulante que tiene en el sistema nervioso central como con el hecho de que causa vasoconstricción.
Su consumo excesivo puede irrumpir los ciclos naturales de sueño, causando insomnio. El efecto de estimulación de la cafeína bloquea a la adenosina, un neurotransmisor que influye en los estados de somnolencia.
Eleva los niveles de colesterol en la sangre, efecto que se da no solo por la cantidad de café que se consume, sino con su preparación.
El café no solamente tiene efectos secundarios sobre el cerebro, sino en otros órganos y sistemas del cuerpo. Uno de ellos es el estómago, ya que, según estudios, “el café tiene un efecto laxante, lo que podría deberse a que contribuye a liberar la hormona gastrina”.
¿Qué personas no deben tomar café?
En primer lugar, se sugiere que las personas sensibles a la cafeína no tomen mucho café, especialmente a la hora de dormir, pues lleva al insomnio o alguna alteración del sueño; además, pese a que protege las arritmias cardíacas, no es recomendable su consumo para individuos sensibles a ello.
Además, expertos restringen la ingesta de café a personas con trastornos digestivos, tal como lo indica Aarp, que hace un especial énfasis al reflujo gastroesofágico. En cuanto a los motivos, “el café puede favorecer la presencia de agruras” y para la gastritis “puede resultar irritante y propicia el dolor estomacal en aquellos que ya sufren de inflamación de la mucosa gástrica”, según la fuente citada.