La necesidad de hurtar, de apropiarse de los bienes ajenos, es algo crónico en la vida de Douglas Antonio Cordero, tal cual se desprende de expedientes judiciales sobre arrestos a lo largo de los últimos 21 años.
El más reciente hurto es de una bombona de 43 kilos, delito cometido la mañana de este martes en una casa situada en la urbanización La Floresta, por la avenida Independencia de Coro.
De 54 años de edad, el residente del sector Zumurucuare cargaba la bombona sobre su hombre cuando los patrulleros de Polimiranda lo arrestaron en flagrancia dentro de la vivienda, una vez recibido el reporte del delito. El hurto de un bien pesado supone la participación de algún cómplice ya que el sitio del delito y domicilio del autor material son distantes.
Entre los tantos arrestos de Douglas, figuran dos materializados por las víctimas y la comunidad. El primero del 4 de marzo el 2002 cuando, con un alicate, violentó la puerta de una casa y comenzo a meter en un saco negro cuantos artefactos eléctricos encontró a su paso. La dueña, que lo observaba, puso en alerta a vecinos de la urbanización El Cardón quienes rodearon la casa, impidiéndole escapar hasta la llegada de la policía.
La noche del 2 de julio del 2009 un grupo de personas lo detuvo por hurto de la unidad del acondicionador de aire de una casa en la urbanización Las Eugenias. Los aprehensores lo entregaron a la Polimiranda. Como estos, existen más casos de hurtos de este maleante según registros del TSJ.
El comisionado jefe Pablo Castro informó que por este nuevo hurto quedó a orden de la Fiscalía Tercera del Ministerio Público.
Valga resaltar y advertir que el hurto continúa como uno de los delitos de mayor incidencia en el estado Falcón y en el caso de cilindros de gas, involucra a terceras personas quienes, al adquirir estos bienes a bajo costo incurren en la modalidad de aprovechamiento de objetos provenientes del delito.
CACTUS24 (02-08-23)
