Una profesora de secundaria que fue despedida después de que se supiera que había estado ausente durante 20 años de su carrera de 24 años se ha defendido.
Cinzia Paolina De Lio enseñó en una escuela cerca de Venecia, Italia, y supuestamente usó una combinación de licencia por enfermedad, vacaciones y permisos para asistir a conferencias para evitar dar lecciones.
Sorprendentemente, se las arregló para salirse con la suya con esta táctica durante dos décadas asombrosas.
De Lio fue despedida originalmente en 2017 después de que suscitara quejas por no estar «preparada» y «falta de atención» cuando regresó a trabajar durante cuatro meses un par de años antes.
Pero llevó el despido a los tribunales, y al año siguiente un juez de Venecia ordenó que se le restituyera en su cargo.
Descontento con la decisión, el ministro de Educación lanzó una contra apelación, que llegó hasta el tribunal supremo de Italia, el Tribunal Supremo de Casación.
La semana pasada, el tribunal terminó revirtiendo la decisión de reincorporar a De Lio, calificando las dos décadas de ausencia como un signo de “ineptitud permanente y absoluta”.
Al criticar el fallo, la profesora de historia y filosofía se comprometió a contar su versión de la historia y dijo que tenía documentos para refutar la idea de que había estado ausente durante 20 años.
Ella le dijo al periódico Repubblica: “Lo siento, pero ahora mismo estoy en la playa”.
“Reconstruiré la verdad de los hechos de esta historia absolutamente única y surrealista.
Cinzia Paolina De Lio afirma tener documentos que desmienten la afirmación de que estuvo ausente durante 20 años
“No respondo preguntas de periodistas que no harían justicia a la verdad de mi historia”.
En el caso del Tribunal de Casación, el ministro argumentó que De Lio había estado ausente del aula durante 20 de sus 24 años de carrera, incluida la totalidad de sus primeros 10 años.
Las ausencias en los siguientes 14 años se atribuyeron a enfermedad, motivos personales o familiares, informa la BBC .
Cuando finalmente regresó al salón de clases en 2015, los estudiantes se quejaron de su forma de corregir «aleatoria e improvisada», falta de preparación y falta de llevar los libros de texto a las lecciones.
De Lio se defendió en la corte argumentando que tenía derecho a la “libertad de enseñanza”.
El tribunal rechazó esto, argumentando que era responsabilidad del maestro garantizar el derecho a estudiar de los estudiantes.
Cactus24 (28-06-23)
