Hay hombres que cuando llegan al orgasmo no eyaculan hacia afuera, por tanto no liberan semen al exterior, o bien la emisión de líquido es mínima. En estos se da una alteración denominada ‘orgasmo seco’.
Esta afección puede ocasionar problemas en la autoestima del hombre, en las relaciones sexuales, así como de cara a la fertilidad. Veamos por qué sucede.
Ignacio Moncada, jefe de Urología del Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela (Madrid), explica que el orgasmo seco es “la ausencia de eyaculación cuando se tiene un orgasmo”. No se debe confundir con la anorgasmia, “en la que lo que no se tiene es el orgasmo”, ya que sí se experimenta “la sensación placentera del orgasmo y la contracción de los músculos bulboesponjosos (que expulsan el semen), pero no sale semen”.
La eyaculación es un proceso complejo. El semen se produce en los testículos. El epidídimo (conducto que conecta los testículos con los vasos deferentes por los que circula el semen) recibe espermatozoides inmaduros de los testículos y los almacena durante varios días.
Al producirse la eyaculación, el semen es expulsado desde una extremidad del epidídimo hacia el conducto deferente. Posteriormente, se desplaza a través del conducto deferente hacia el cordón espermático situado en la cavidad pélvica más allá del uréter y detrás de la vejiga. Una vez allí, en el vaso deferente se une con la vesícula seminal (glándula que ayuda a producir el semen) para formar el conducto eyaculatorio, que atraviesa la próstata y se vacía en la uretra.
Al producirse la eyaculación, los movimientos rítmicos musculares impulsan el esperma hacia delante en condiciones normales. Pero puede suceder que el semen vaya retrógradamente hacia la vejiga y, posteriormente, salga mezclado con la orina. Es la denominada eyaculación retrógrada, que se da fundamentalmente en pacientes operados de hiperplasia benigna de próstata mediante láser o con la técnica de resección transuretral (RTU).
Cactus24 (28-06-2023)