LeBron James se convirtió el pasado martes en el máximo anotador de la historia de la NBA al superar la legendaria marca de Kareem Abdul-Jabbar.
James necesitaba 36 puntos para batir el récord de 38.387 puntos de Abdul-Jabbar y los consiguió en el partido que disputaron los Lakers en Los Ángeles frente a los Oklahoma City Thunder.
De 38 años y con un nivel extraordinario en su vigésima temporada en la liga, James sumó así un hito más a una carrera excepcional que incluye cuatro títulos de la NBA (2012, 2013, 2016, 2020) y cuatro MVP de la temporada regular (2009, 2010, 2012 y 2013).
Las 19.000 personas espectadoras, entre ellas la familia de James y una colección de celebridades, se pusieron en pie para ovacionar a la figura de los Lakers, que a sus 38 años sigue agrandando un extraordinario palmares que le sitúa en el debate de los mejores jugadores de la historia.
El partido se paró cuando el marcador señalaba una victoria parcial de los Thunder por 104-99 para brindar un breve homenaje a la hazaña de James.
Este es «un récord que se ha mantenido durante casi 40 años y que mucha gente pensó que nunca se rompería. LeBron, eres el líder anotador de todos los tiempos de la NBA. ¡Felicidades!», expresó el comisionado de la NBA, Adam Silver, desde el centro de la cancha.
Un James conmovido hasta las lágrimas dio las gracias a Abdul-Jabbar, quien le acompañó en la ceremonia, a su familia y a sus seguidores. «Solo quiero dar las gracias a los aficionados de los Lakers. Son únicos. Poder estar en presencia de una leyenda como Kareem significa mucho para mí. Denle una ovación de pie al capitán, por favor», demandó James.
«Muchísimas gracias por permitirme formar parte de algo con lo que siempre he soñado», afirmó. «Nunca jamás, en un millón de años, hubiera soñado con algo mejor de lo que es esta noche».
Cactus24 08-02-23