La Cámara de Diputados de México rechazó el proyecto de reforma electoral, que crearía un nuevo instituto electoral, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador al no alcanzar la mayoría calificada.
En el Congreso mexicano, integrado por 500 legisladores, se necesitan 334 votos para alcanzar una mayoría calificada.
«Se emitieron 269 votos a favor, 1 abstención y 225 en contra no hay mayoría calificada», apuntó la Secretaría General de la Cámara de Diputados.
«En virtud de no alcanzarse la mayoría calificada se desecha el proyecto de decreto», por el que se pretendía reformar diversas disposiciones de la Constitución, en materia electoral, dijo el presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel.
La sustitución del Instituto Nacional Electoral
La reforma, que López Obrador presentó en abril pasado y que se discutió duramente en el Congreso mexicano, causaba polémica porque crearía el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC) para sustituir al actual Instituto Nacional Electoral (INE), órgano autónomo que surgió para quitar el control de las elecciones al Gobierno.
Además, sometería a voto popular a los consejeros del INE y a los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
También eliminaría 200 diputados y 32 senadores, reduciría el financiamiento de los partidos políticos y redefiniría el concepto de «propaganda» para que el Gobierno se pronuncie durante las elecciones, disposiciones criticadas porque pueden favorecer al actual partido en el poder.
Al tratarse de una reforma constitucional, los votos requeridos para su aprobación eran 334, pero los diputados opositores actuaron en bloque hasta sumar 225 votos.
Mientras que el partido en el poder Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados de los partidos Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT) sumaban 276 votos, pero solo acumularon 269.
El Plan B del presidente
Queda pendiente para la próxima sesión, la discusión de la iniciativa de reforma a diversas leyes electorales, a partir de las cuales se limita política y económicamente al Instituto Nacional Electoral (INE) y se compactan sus estructuras, así como algunas funciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El documento que se presentará, llamado «Plan B», ya estaba listo después de que se anticipara el rechazo de la oposición a la reforma electoral de López Obrador.
El lunes, la organización Human Rights Watch (HRW) dijo que la reforma electoral de López Obrador «ponía en jaque las elecciones libres e imparciales» y por ello el Congreso mexicano debería «rechazar modificaciones al sistema electoral».
El pasado 13 de noviembre, miles de personas, en su mayoría opositores, marcharon por las calles de Ciudad de México y otras ciudades del país en defensa del INE y contra la polémica reforma electoral de López Obrador.
La «Marcha por la Democracia» convocó a unas 100.000 personas que mostraron su rechazo a la propuesta.
Cactus24 07-12-22