Simón Teodoro Alvarado Vásquez, de 21 años, estudiante de ciencias policiales de la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad (UNES), recibió un disparo en la cabeza estando dentro del dormitorio de varones de la estación de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), frente a la plaza Bolívar de Cabudare, municipio Palavecino. Al parecer, un funcionario disparó su arma de reglamento de manera accidental.
El diagnóstico actual del discente es reservado. El muchacho se debate entre la vida y la muerte en la UCI del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda, conectado a un respirador artificial y esperando evolución satisfactoria, para así practicarle diversas intervenciones quirúrgicas que requiere.
La versión policial indica que Simón estaba en el dormitorio de varones el sábado a la 1:00 de la tarde con otros estudiantes de la UNES, pertenecientes a la promoción número 20, pues estaban en prácticas profesionales, ya que les falta poco para egresar de la universidad.
La fuente indica que Simón, sus compañeros y el oficial de la PNB (graduado) Deiberth Josué Acosta Soto, de 19 años, estaban en el mismo sitio, presuntamente «jugando» con el armamento asignado del oficial. A pesar de que aún no hay una explicación extensa del suceso, se presume que fue en ese momento que, de manera accidental, el funcionario activó el arma y salió el disparo.
El proyectil disparado entró por la parte de atrás de la cabeza de Simón de lado izquierdo y atravesó por dentro el cráneo hasta llegar al ojo derecho. Hasta ahora, están comprometidos ambos ojos de Simón y parte de su oído izquierdo. También presentó una herida en la mano izquierda pues, según la fuente, Simón al escuchar la detonación trató de cubrirse la cabeza; sin embargo, el proyectil traspasó el dedo índice./La Prensa de Lara.
CACTUS24 25-07-22
