El gobierno de Olaf Scholz inyectará miles de millones de euros para salvar a uno de los gigantes energéticos alemanes, Uniper, asfixiado por los cortes de gas ruso, e intentará fijar límites de tarifas para los hogares afectados por la crisis energética.
«Uniper es una empresa de vital importancia para el desarrollo económico de nuestro país y para el suministro energético de nuestros ciudadanos», dijo el viernes el canciller alemán tras presentar el paquete de ayudas..
El grupo se beneficiará de un préstamo público de «hasta 7.700 millones de euros (7.821 millones de dólares)» en bonos convertibles obligatoriamente que eventualmente se convertirán en acciones.
El plan «comprende un aumento de capital de aproximadamente 267 millones de euros (271 millones de dólares) por un precio de emisión de 1,70 euros (1,72 dólares) por acción», indicó la compañía.
También se prevé un aumento en la línea de crédito disponible para la empresa a través del contratista KfW de 2.000 a 9.000 millones de euros (de 2.031 a 9.143 millones de dólares), prosiguió Uniper.
Uniper, el mayor importador y almacenador de gas de Alemania, se ha visto muy afectado por la caída del suministro de gas ruso desde mediados de junio y llevaba varias semanas pidiendo ayuda al gobierno de su país.
Alegando la ausencia de una turbina, el gigante ruso Gazprom ha reducido en un 60% sus entregas a través del gasoducto Nord Stream, esencial para el abastecimiento de Alemania.
Para cumplir sus contratos, el grupo alemán debe ahora obtener gas en el mercado, donde los precios se han disparado.
Como resultado, Uniper, que emplea a casi 12.000 personas en todo el mundo, está perdiendo «decenas de millones de euros» cada día, según su jefe.
Cientos de empresas municipales y proveedores de energía alemanes son clientes de Uniper, por lo que cuando los precios se trasladen a ellos, a partir de octubre, los cargos adicionales podrían «ascender a 200 o 300 euros al año para una familia de cuatro miembros», advirtió Scholz.
El canciller se comprometió personalmente a evitar la quiebra de Uniper que amenazaría, por efecto dominó, con perjudicar el mercado energético y causar escasez de energía a miles de clientes.
Según Uniper, el Estado también prometió, durante las negociaciones, que introduciría «un mecanismo que permita (…) trasladar los precios» a los clientes a partir del «1 de octubre de 2022».
Cactus24 22-07-22
