Un portavoz del Departamento de Bomberos local, Derrick Ramirez, precisó que los niños muertos tenían 3, 8 y 10 años y que el incendio se produjo en un barrio de viviendas improvisadas dentro del campus de la Universidad de Filipinas en Quezón, la ciudad más poblada de la zona metropolitana.
Los bomberos tardaron unas dos horas en extinguir el siniestro, que comenzó a las cinco de la madrugada y en el que las víctimas se vieron atrapadas por la rapidez con la que se propagaron las llamas.
Al menos otras tres personas resultaron heridas en el incendio, dijo a la AFP Greg Bichayda, un oficial de bomberos. «Las casas son de materiales ligeros. Cuando estalló el incendio, la gente fue tomada por sorpresa», agregó Bichayda. «Nuestra estación está cerca pero no pudieron llamarnos inmediatamente», explicó.
En las imágenes subidas a la redes sociales por los bomberos, se puede observar como el fuego engulle los improvisados chamizos, construidos con chapa y otros materiales ligeros.
Las autoridades están investigando las causas del desastre, que ha dejado a decenas de familias sin hogar.
Más de 13 millones de personas habitan la densamente poblada capital filipina. Y el 43 por ciento de ellas vive en este tipo de infraviviendas, en barriadas marginales atiborradas, según datos del Banco Mundial.
Los incendios en zonas de chabolas son frecuentes en Filipinas.
Ccatus24 02-05-22