Sabanas Altas, municipio Píritu, estado Falcón vuelve a ser noticia, esta vez no con incautación de drogas o detención de presuntos narcotraficantes sino la detención de dos guardias nacionales y un carnicero involucrados en abigeato.
El pueblo trabajador de Sabanas Altas, que nada tiene que ver con las presuntas actividades ilícitas de otros, venían reportando que en medio de los despliegues, los funcionarios se aprovechaban para apropiarse de bienes y en muchos casos de reses.
La noche de este domingo el pueblo Tutanal-Sabanas Altas enardecido detuvo a dos guardias nacionales uniformados y con chalecos tras descubrir que habían hurtado siete reses de las cuales ya habían matado tras que se disponían a sacar en el camión Ram rojo de un hombre que también fue detenido por el mismo pueblo que montó una alcabala.
Otros dos guardias nacionales escaparon por el monte dejando abandonadas las motos propiedad de la GNB.
En cuanto a los guardias detenidos y el civil, el pueblo los mantiene desde anoche en la plaza de Sabanas Altas, a la espera de un Fiscal del Ministerio Público a quien entregarlos esperando que sobre los mismos caiga todo el peso de la ley, y que sean buscados los otros guardias que según, cumplían órdenes superiores según confesaron en material audiovisual que como evidencia conservarían los aprehensores.
Entre otras evidencias el pueblo incautó el camión, tras redes descuartizadas y rescató otras cuatro reses que también iban a ser sacrificadas.
Trascendió que los guardias llegaron a Sabanas Altas a eso de las 2:00 de la tarde para supuestamente hacer patrullaje. No obstante, se concentraron en la finca de un productor hasta donde se acercaron algunos pobladores ante el rumor de que estaban incurriendo el delitos contra la actividad ganadera.
Uno de los guardias alegó que estaban en operativo, pero cuando le vieron el uniforme lleno de sangre, los pobladores tuvieron dos sospechas: o habían matado a alguien o estaban matando reses.
Recuerdan que cerca de las 5:00 pm había llegado el camión rojo que alcanzaron a ver cerca de donde estaban los guardias. Como no pudieron acceder a la finca donde llevaron a cabo la matanza de reses, el pueblo se organizó, esperó en la carretera hasta montar una alcabala y así fue como detuvieron a los dos guardias y al civil, haciendo que otros dos militares huyeran abandonando las motos.
Gerardo Morón Sánchez/ Cactus24 (02/04/2022).