El Ministerio Público solicitó 35 años de prisión contra los ciudadanos de nacionalidad venezolana Alberto Perozo Borja, alias ‘Guasón’ y Angelbert Alejandro Díaz Colina alias ‘Alejandro Tarra’ por el asesinato y descuartizamiento de Jafet Caleb Torrico y Rubén Matamoros Delgado en el hostal ‘Señor de Sipán’ del distrito de San Martín de Porres en 2019.
La medida fue requerida por el fiscal Luis Chauca, quien acusó a estos dos hombres por los presuntos delitos de homicidio calificado y banda criminal, por lo que además solicitó que paguen la suma de S/ 60 000 por concepto de reparación civil a favor de los deudos de las víctimas.
El representante el Ministerio Público también pidió que los acusados sean expulsados del país tras cumplir la condena que la justicia es imponga en este caso.
Juicio oral
La acusación penal fue formalizada por el fiscal ante el Primer Juzgado Penal Colegiado Transitorio de Lima Norte el 21 de abril cuando inició el juicio oral contra los ciudadanos venezolanos, quienes cumplen mandato de prisión preventiva en el establecimiento penitenciario Ancón I, como parte de este caso.
Luego de dar por instalado el juicio oral, el colegiado declaró reo contumaz a Jhonatan Jesús Donayre Semprún, quien se encuentra con orden de captura a nivel nacional. En tanto, el imputado Freddy Xavier Sulbaran, alias ‘Machelo’ se encuentra sometido a un proceso de extradición desde Colombia.
Durante el inicio del juicio, los familiares de Jafet Caleb Torrico se constituyeron como actor civil y solicitaron ante el tribunal la suma de 2 millones 140 mil soles por concepto de reparación civil.
Crimen en San Martín de Porres
El lunes 9 de setiembre de 2019 se hallaron los restos descuartizados de Jafet Caleb Torrico y Rubén Matamoros Delgado en diferentes puntos de Lima, San Martín de Porres y el Rímac. Habían sido envueltos en sábanas del hostal Señor de Sipán, en San Martín de Porres.
Perozo y Díaz fueron capturados una semana después del crimen en la ciudad de Tumbes y el distrito limeño de San Martín de Porres, respectivamente. El primero confesó su participación en el doble homicidio y explicó a la Policía que el crimen se habría dado por una deuda por venta de drogas.
Dos semanas después del hallazgo, la Policía Nacional del Perú confirmó la desarticulación de una organización criminal dedicada a la venta de drogas y la prostitución en la que participaban al menos 12 ciudadanos de nacionalidad venezolana.
CACTUS24 24-04-22