Día y medio. Ese es el tiempo que han tardado los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) en acordar una batería de sanciones contra Rusia por el ataque a gran escala contra Ucrania, que incluye duras restricciones a sectores estratégicos para la economía asiaeuropea. Estas incluyen penalizaciones a bancos, energía, finanzas, exportaciones, transporte y política de visados, además de la congelación de activos al presidente ruso, Vladimir Putin, y el ministro ruso de Exteriores, Sergéi Lavrov, en un intento por acorralarle.
Así lo ha confirmado, el ministro letón de Exteriores, Edgars Rinkevics, que ha indicado que el paquete acordado por unanimidad por los Veintisiete incluye la congelación de activos de Putin y Lavrov. «Prepararemos un tercer paquete», ha asegurado, adelantando nuevas medidas europeas contra Moscú en plena guerra contra el país vecino. La decisión se toma después de que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, haya pedido de forma desesperada ayuda a la OTAN para poder hacer frente a un ejército ruso que continua firme en su intención de invadir todo el país.
La reunión de este viernes entre la Unión Europea y la OTAN ha ratificado las medidas que ya avanzaron en la madrugada anterior los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete. No se ha querido ratificar por el momento un listado concreto y exhaustivo de medidas, dado que se pretende llevar a cabo una aplicación gradual de las mismas a medida que avance el conflicto. En principio, todo va a empezar por un freno drástico al comercio exterior entre Rusia y el bloque comunitario, que se ira desvelando progresivamente según los sectores y los países.
Bloquear el sistema bancario ruso
Lo que sí tienen claro los socios comunitarios la paralización de los flujos financieros entre ambas partes. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, aseguró que en materia financiera se bloqueará el 70% del sistema bancario, así como la imposibilidad de acceder por parte de las empresas a los mercados de capitales. Los expertos aseguran que esto añadirá más presión sobre la inflación rusa y lastrará el crecimiento económico del país.
En este sentido, otra de los posibles castigos sería la expulsión del sistema de pagos bancarios Swift, que no está incluido en este paquete, pero posiblemente lo estará en futuras restricciones. El chantaje con Switf ha sido calificado como «el arma nuclear financiera», ya que permite bloquear a las entidades financieras rusas el acceso a las transacciones con el resto del mundo y, por tanto, generaría graves efectos colaterales a nivel mundial. Con sede en Bélgica, Swift es un plataforma que conecta a unas 11.000 instituciones financieras de todo el mundo y funciona como sistema de mensajería para informar de transacciones financieras, con lo que se ha convertido en un pilar fundamental del sistema financiero internacional.
Al final del encuentro de este viernes, se mantenía la idea de bloquear este sistema si bien, para evitar males inesperados, se decidió realizar un estudio sobre el impacto que una medida tan grave como está supondrá para todos los países implicados. Desde España, el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha indicado que el país es partidario de incluirlo en el paquete en las sanciones a Rusia, que por ahora se ha dejado fuera.
Energía, aeronáutica y tecnología
El segundo capítulo se centra en la energía, que desde la Comisión Europea lo califican como un «sector económico clave», que beneficia al Estado ruso, como principal suministrador de gas al Viejo Continente. «Nuestra prohibición afectará a las exportaciones de petróleo, que le generaron unos ingresos por exportación por valor de 24.000 millones de euros en 2019», aseguran desde la UE.
Rusia importa tres cuartas partes de su flota aérea comercial, lo que le convierte en un gran dependiente en este aspecto. Usando este talón de Aquiles, el club comunitario ha prohibido toda la venta de toda clase de aeronaves, piezas de recambio y equipos a las compañías aéreas rusas. La intención es «deteriorar la conectividad del país». El cuarto punto que incluyen en el listado es la «limitación» del acceso a Rusia a tecnologías «cruciales», tales como los semiconductores. La decisión se toma en medio de una grave escasez de chips que afecta a nivel global, tras la caída de la producción y posterior recuperación a raíz de la pandemia.
Suiza y Reino Unido
Los 27 no son los únicos en poner limitaciones a Putin por la invasión rusa. El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha secundado a la UE con el anuncio de una nueva batería de sanciones que incluyen la congelación de los activos de los mayores bancos rusos y medidas contra cien individuos y entidades del país. También ha decidido prohibir las operaciones de la aerolínea Aeroflot y la suspensión de las licencias de doble uso, las exportaciones de artículos de alta tecnología y de equipos de refinería de petróleo.
Por su parte, el presidente de Suiza, Ignazio Cassis, ha informado que su país se sumará «parcialmente» a las sanciones de la Unión Europea. Asimismo, la Embajada suiza en Kiev permanecerá «cerrada» hasta nuevo aviso, aunque ha matizado que se podrán realizar trámites por teléfono.
Estados Unidos y Australia
De manera paralela, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha establecido sanciones contra cinco grandes entidades financieras rusas, entre ellas VTB, el segundo mayor banco del país. «Esto significa que todos sus activos en EEUU serán congelados. Vamos a frenar la capacidad de Rusia de financiarse», ha remarcado. Biden también ha hablado de un mayor control de las exportaciones y restricciones a empresas millonarias para mermar su economía, y un paquete de medidas contra «las élites rusas», entre las que se encuentran las familias de Ivanov y Sechin, el político Nikolai Patrushev o los directivos banqueros Andrey Puchkov, Yuriy Solviev, y Alexander Vedyakhin. Canadá también sancionará a los miembros del Consejo de Seguridad de Rusia, los ministros de Defensa, Finanzas y Justicia del país. También dejará de emitir permisos de exportación para productos destinados a Rusia y cancelará los permisos existentes.
En esta línea, el primer ministro de Australia, Scott Morrison, impone una serie de medidas adicionales a 25 personas y cuatro entidades que han sido responsables de la agresión inaceptable y no provocada. Nueva Zelanda no permitirá la entrada a funcionarios rusos y otras personas asociadas a la invasión, prohibirá la exportación de bienes a las fuerzas militares y suspenderá el compromiso bilateral que tienen. Japón suspenderá la emisión de visados a Rusia, congelará los activos de las personas vinculadas a las regiones prorrusas e impondrá una prohibición comercial a las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk.
CACTUS24 25-02-22